Lo clásico nunca muere

“Spectre”, la nueva entrega de James Bond, es una prueba más de que lo clásico nunca pasará de moda. Ejemplos de ello son su título, el villano en esta nueva historia, así como el elenco que vuelve de “Skyfall” (la cinta antecesora, estrenada en 2012). 

Cuando una trama, personaje o franquicia entera llevan medio siglo en el gusto del público, la fórmula ha resultado ser un éxito. Por ello, volver al origen y mezclar innovación con toques de nostalgia y detalles de las primeras entregas, es equivalente a “volver al futuro”. 

Aunque el público tiene la última palabra, lo cierto es que este tipo de dinámica atrapa a aficionados de antaño, al tocar fibras del pasado, y envuelve a nuevos espectadores.

El título “Spectre” se refiere a las siglas cuyo significado es “Special Executive for Counter-Intelligence, Terrorism, Robotics and Extortion” (o “Ejecutivo especial de contrainteligencia, terrorismo, robótica y extorsión”), que a la vez era el acrónimo de la organización criminal a la que persiguió Bond en su primera cinta.

Y es que tras el éxito de “Skyfall”, el director Sam Mendes vuelve a colaborar con John Logan como guionista, y tiene a la mayor parte del cast de regreso. 

Daniel Craig como el agente 007 por cuarta ocasión, Naomie Harris como Moneypenny, Ralph Fiennes como M., Rory Kinnear como Tanner y Ben Whishaw como Q. 

Además, se unen dos Chicas Bond, una de ellas es Monica Bellucci en el papel de Lucia Sciarra, y la otra es la francesa Léa Seydoux como Madeleine Swann. 

Y como el villano no estará Stephen Hawking, quien esta semana declaró en la revista Wired que “su papel ideal sería el de villano de Bond (…) la voz y la silla de ruedas serían perfectas para el rol”, sino el actor alemán Christoph Waltz como Oberhauser.

Waltz indicó que un personaje de este tipo no se piensa dos veces, “todo el mundo ha visto películas de James Bond desde niño. Es casi una leyenda de la mitología moderna. Para participar en esto no hay que reflexionar, lo haces, es todo”.

Tener a Oberhauser en la trama es dar justo en el blanco “entre el pasado y el futuro”, ya que se decía que se trataba del hijo del fallecido Hans Oberhauser, quien fuera un instructor de esquí, considerado casi como un padre para Bond durante su infancia. 

Sin embargo, todo indica que se trata de Blofeld, un villano que ya había aparecido en “Solo se vive dos veces” (1967), “007 al servicio secreto de su Majestad” y en “Diamantes para la eternidad” (1971). También formó parte del elenco en ‘Desde Rusia con amor’ en 1963, y en “Operación Trueno” (1965), pero en dichas cintas no se le veía el rostro, pues aparecía acariciando un gato de angora de color blanco. Este malvado personaje creado por Ian Fleming también estuvo en “Nunca digas nunca jamás”(1983).

Aunque muchos fans dieron a conocer en redes sociales que no querían ver a Christoph Waltz con un gato de angora, en cambio querían traer al Oberhauser (o Blofeld) de antaño, este personaje ya está causando expectativas altas, al igual que el filme.

Inclusive Daniel Craig dijo que estaban “un poco nerviosos” porque el éxito de “Skyfall” es una vara muy alta. La cinta cuyo tema principal homónimo fue interpretado por Adele y se llevó el Oscar a Mejor Canción Original, recaudó más de mil millones de dólares en la taquilla, a nivel global.

Pero el público puede estar tranquilo, ya que Sam Mendes tiene cierto toque para apelar a la nostalgia, sobre todo si se trata de Bond. Basta recordar la escena en la que el 007 opta por proteger y esconder a M. (Judi Dench), y para ello pretende pasar desapercibido a bordo del clásico y emblemático Aston Martin DB5.

Y es que el espectacular coche que maneja James Bond se ha vuelto un ícono de esta franquicia cinematográfica que cumplió 50 años en el 2012, con el estreno de “Skyfall”. En esta ocasión el agente del MI6 tendrá un Aston Martin DB 10, “y lo que es capaz de hacer (el coche), ya lo verán en la película”, declaró Mendes.

Uno de los elementos más virales tras el anuncio de “Spectre”, además de la incorporación de Waltz al elenco y el personaje que encarnará, así como el suéter púrpura que utilizó Craig en la presentación en los Pinewood Studios, es que el rodaje se llevará a cabo en el Distrito Federal. 

A su vez, se filmarán escenas en Los Alpes austriacos, Roma, Tánger y Solden, según dio a conocer Mendes.

El rodaje comienza este lunes 8 de diciembre y todo apunta hacia efectos especiales deslumbrantes, un elenco sin igual y claro, una respuesta favorable en la taquilla internacional. Mendes tiene todos los elementos para lograr la combinación y la fórmula perfecta entre el pasado, el presente y el futuro de Bond, James Bond.