A la mayoría de las mujeres nos gusta maquillarnos, algunas prefieren sombras muy cargadas, otras algo más natural. Todas y cada una de nosotras hemos sufrido buscando el tono perfecto para el color de nuestra piel, así como los cosméticos dermatológicamente adecuados.
No es tarea fácil, pero ahora lo será menos complicado gracias a iniciativas como “Mink”, de Grace Choi, egresada de la Escuela de Negocios de Harvard. Se trata de una pequeña impresora de 3D, con la que podrás crear tu propio maquillaje.
Con “Mink” podrás imprimir sombra para ojos, labial y hasta rubor con una misma tinta, que ya está aprobada por la Food & Drug Administration (FDA), de Estados Unidos. Esa tinta es la misma que utilizan las compañías de cosméticos reconocidas.
¿Lo mejor? Se acabaron las horas frente a los anaqueles y la indecisión de los colores, ya que Choi asegura que esta máquina copia los códigos de los colores de manera exacta. Solo tienes que tomarle una fotografía al esmalte que te gustó y la impresora dará la tonalidad idéntica.
“Mink” puede conectarse a cualquier computadora, como si se tratara de un impresora tradicional.
Grace presentó su producto durante la “TechCrunch Disrupt”, en Nueva York, y pretende que se lance al mercado con un costo de 300 dólares.
Esta iniciativa ha causado revuelo en Internet y ya hay miles de interesadas pidiendo su impresora “Mink” en línea, sin embargo, según dijo a Bazaar.com Jim Hammer, de Mix Solutions Consulting, “es una implementación genial de la tecnología en 3D (…) pero creo que está muy lejos de la implementación real (…) muchos de los colorantes que se utilizan en el maquillaje son pigmentos minerales, óxidos de hierro , colorantes ultramarinos, etc. Estos son polvos insolubles y no son casi los mismos que las soluciones de colorantes líquidos que se utilizan normalmente en las impresoras de inyección de tinta de tipo CYMK”.
