Con toda la vibra infantil

¿Qué se piensa cuando se cruza por la cabeza la palabra reggae?

Para muchos la imagen de un sonriente y “viajado” Bob Marley viene a la mente, con sus rastas curtidas por el tiempo, o un león coronado con los colores verde, amarillo y rojo en franjas hechos bandera de Etiopía, o mejor aún, un carrujo de mariguana a punto de estallar como inmortalizaran Cheech Marin y Tommy Chong en “Up in smoke” en 1978.

Para los hermanos Leopoldo “Polock” y Jacinto “Chinto” Gutiérrez, las letras de “Jamming” de Marley sólo son una parte del movimiento musical jamaiquino, pero ellos se desprenden de la mística que envuelve las rutas del reggae, prefieren componer canciones que van en un tono que propicie la alimentación, el cuidado animal o el juego entre los niños mexicanos.

“No somos realmente un grupo de personas que consumamos drogas en exceso, nuestros ensayos están casi siempre enfocados a la música, somos personas que tratamos de hacer congruencia con la forma de vivir que promovemos”, explica en entrevista Polock Gutiérrez.

Es así como Vibra Muchá lanzó el disco “Vibritas” (2015), el cual contiene nueve temas que están perfilados al público infantil.

Jacinto y Leopoldo de 35 y 33 años respectivamente, prefieren utilizar el apellido Muchá de manera artística y aunque no tienen hijos sienten que era necesario que en México se retomara la música infantil y porqué no, con estilo reggae.

“Cuando tenía las clases con los niños, me gustaba compartirles un poco de música al final de la clase (…) y después de un rato de ponerles sobretodo las canciones con las que yo crecí que era la música de Cri-Cri y los hermanos Rincón, pues se me acabaron las canciones y de ahí surgió la idea de compartirles una canción nueva y diferente para que tuvieran otro panorama, otro sonido para escuchar”, argumenta Chinto Muchá.

La agrupación integrada además por Marco “Morky” Rocha y Andah Irie como vocalistas, más Sergio “Marvin” Carrera en el bajo, sigue promocionando “Vibritas”, tocando un espectáculo solamente dedicado a este disco en primarias y demás lugares donde haya aforo infantil, su próxima presentación será en el Club Atlántico este 30 de abril a las 13:00 horas.

Con ciertos juguetones

En el Parque Cuemanco al sur de la Ciudad de México, bajo la sombra de los árboles, con los juegos infantiles de fondo, la banda de reggae se sinceró al sentirse cómplice con su público menor de edad y explicar que en sus tocadas, hacen partícipe a los asistentes, teniendo una experiencia interactiva con los integrantes musicales.

“En vivo los niños responden bastante bien, al principio están tal vez un poco como tímidos pero conforme avanza el concierto, agarran confianza y eso ayuda mucho a que los papás también agarren confianza y puedan desinhibirse un poco”, narra Morky Rocha.

De las presentaciones en vivo que los músicos recuerdan como destacables, están los escenarios del Centro Nacional de las Artes y la Casa del Lago, donde pudieron tener proximidad con familias e infantes de todas las edades.

“A mi me gustó mucho el impacto que tuvo el disco cuando vamos a primarias, se genera demasiado interés (…) vemos que también les interesa a los maestros, hay maestros que compran los discos y se los siguen poniendo a los alumnos en las clases”, comenta la vocalista Andah Irie.

Los temas favoritos

Con rimas melódicas como “Perro que ladra alegremente, no quiere morderte” en la canción “¡Qué perro!”, o “Al mediodía una sandía, y por la noche un tejocote” en “Las frutas”, es como Vibra Muchá se vuelve pegajoso en chicos y grandes, transmitiendo una felicidad que irradia por su simpleza musical.

“De las que disfruto más cantando en vivo es ‘Las frutas’ y ‘El robot de chocolate’, en vivo no tocamos sólo la rola, metemos otras cosas como un show”, explica Rocha.

Chinto Muchá compuso primeramente la canción “Vampiro amarillo” para sus alumnos y confiesa que no era una idea concreta hacer un disco de reggae para niños, pero debido a un concurso organizado por el Circo Volador y el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA), el joven se atrevió a escribir “El robot de chocolate” y acreditarlas para el certamen, quedando en primer lugar.

Uno de los temas que la banda se encuentra promocionando actualmente es “María Cirila”, que impulsa a la higiene y el buen baño del cuero cabelludo, pero además la canción presenta toques de son jarocho, género con el que buscan fusionar la música 
a futuro.

La fusión jarocha

Con pandero en mano y dos jaranas los jóvenes músicos se pasean por la calle Cerezos al terminar la entrevista, canturreando “María Cirila”, ganando las miradas de los pocos curiosos de la colonia Granjas Coapa.

“Este año estamos preparándonos con todo lo que podemos para hacer un disco de reggae con son jarocho, es con una temática ya abierta, no es dedicado el público infantil”, 
revela Polock Muchá.

Los integrantes fueron a Veracruz para prepararse en este género, donde tomaron un seminario. Vibra Muchá espera entrar en estudio a finales del 2017 para tener este nuevo material.

“Hacemos el concierto infantil con las canciones que hemos hecho para niños y el concierto juvenil con las canciones que son para los chavos, porque al principio quisimos combinarlas para ver qué pasaba pero como que la gente lo sintió medio raro, entonces nos hemos enfocado a tener los dos conciertos”, describe Chinto Muchá, quien busca seguir componiendo más temas dedicados a los niños a futuro próximo después del nuevo álbum.

Ahí viene el cómic

Para seguir complaciendo a los infantes, además del material de “Vibritas”, la agrupación ya encargó una historieta de una de las canciones más gustadas por los músicos, “El robot de chocolate”.

“La idea es que si la historieta queda bastante chida, hacer un video sobre la historieta, hacer como un video de animación sobre la historieta de ‘El robot de chocolate’, puede ser atractivo para los niños”, exclama Chinto.

Este proyecto gráfico se le encomendó a uno de los primos de los hermanos Gutiérrez, quien estudia actualmente en Lyon, Francia, este arte.