El accidente en el que perdieron la vida Diana de Gales y su novio, Dodi Al-Fayed, ha sido uno de los casos de mayor controversia, conspiración y cobertura mediática de los últimos 20 años.
Recientemente se dieron a conocer revelaciones que señalan a un militar británico de las fuerzas especiales del SAS, lo que “ha levantado una polvareda en el entorno de Buckingham que en seguida se ha apresurado a mostrar su indignación en incredulidad”, publicó El Mundo.
Los medios británicos y AP reportaron este fin de semana que Scotland Yard, el servicio de policía británica metropolitana, está investigando el caso nuevamente.
Según la nueva teoría, Al-Fayed, Lady Di y el chofer no perecieron por el accidente automovilístico, sino a causa de un disparo propiciado por un francotirador.
A lo largo de estos años, el palacio real inglés ha desmentido las especulaciones, entre ellas la del papá de Dodi, el multimillonario Mohammed Al-Fayed, quien aseguró que la familia real los mandó matar por no aprobar la relación.
Se llegó a decir que el chofer había consumido alcohol y en combinación con la velocidad para huir de los paparazzi, el choque resultó fatal.
La fuente de la nueva teoría y conspiración es un exsoldado británico. Sus suegros fueron quienes proporcionaron esa información a la policía.
El palacio de Buckingham calificó estos rumores de “absurdos” y subrayó que no tenían sentido. Ken Wharfe, exguarura de Diana, dijo que se trata de un disparate y un montaje absurdo. Ya que el soldado que dio la información está encarcelado por posesión ilegal de armas.
Para algunos es una estrategia mediática, pues el aniversario luctuoso de Diana de Gales y Dodi Al-Fayed es el 30 de agosto y la película sobre su vida –protagonizada por Naomi Watts–, será estrenada en el Reino Unido el 5 de septiembre de este año.
