Videojuegos: ¿amigos o enemigos?

La Organización Mundial de la Salud declaró a la adicción a los videojuegos como una enfermedad mental; especialistas en el tema psicoanalítico y médico expresan que hay antecedentes suficientes para sustentar la decisión del organismo internacional, pero aclaran en qué situaciones este entretenimiento no es perjudicial
Hidalgo Neira Hidalgo Neira Publicado el
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El eterno debate entre si los videojuegos pueden perjudicar la salud, causar dependencia o entorpecer las habilidades sociales de las personas, entra en un nuevo capítulo de la era moderna.

Este estigma que viven las consolas desde su creación, a finales del siglo XX, toma un nuevo cariz con la decisión de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de catalogar como una enfermedad menta la adicción a los videojuegos.

En la reciente edición de la Clasificación Internacional de Enfermedades (conocida como CIE-11) se incluyó el trastorno por videojuegos, el cual se diagnostica de esta manera después de haber visto un patrón negativo en la persona durante 12 meses.

Respecto a este pronunciamiento, el psicoanalista Alejandro Beltrán comenta que internacionalmente se llevan años estudiando las implicaciones de los problemas del abuso de las consolas en la vida diaria, pero en México aún no existen estudios precisos en torno al tema.

“Todavía es muy temprano, sobre todo en el caso de México, como para que se hable de algún dato estadístico, lo que sí es que en las consultas psicoterapéuticas con niños y adolescentes es un factor cada vez mayor, pero los padres todavía lo asocian con otra clase de problemas, no lo ven como un problema central, por lo menos en México”, comenta el terapeuta en entrevista para Reporte Índigo.

También el neurólogo Jorge Islas precisa que los niveles de codependencia al ocio electrónico se podrían comparar con los que produce el abuso de sustancias ilícitas e, incluso, marcar síndrome de abstinencia en personas cuando se les corta el acceso a esta tecnología de entretenimiento.

“No duermen, no comen bien, no hacen ningún tipo de actividad y cuando se les quita— tengo experiencia personal con mis pacientes— tienen signos de abstinencia, se sienten muy mal cuando no juegan. Entonces definitivamente sí es una adicción, igual que la adicción a la cocaína o a cualquiera de las drogas”, apunta el médico que forma parte de la plataforma Doctoralia.

Sin embargo, no todo es negativo en el empleo recreativo de las consolas, para los especialistas el uso moderado de estos equipos es un aliciente para la vida diaria y es mejor utilizarlos en familia.

El nuevo juego de mesa

Para el psicoanalista hay que aprovechar la tecnología del ocio, hacerla incluyente en las dinámicas de familia, además de estar conscientes de que los padres son los que introducen los aparatos a sus hijos por tener el poder adquisitivo; en lugar de satanizar a los videojuegos hay que saberles sacar provecho tolerado.

“Más que asustarse, yo le pediría a la gente que se acercara con sus hijos y que jueguen videojuegos con ellos, estos aparatos llegaron para quedarse porque son muy divertidos, son los juegos de mesa del mundo actual”
Alejandro BeltránPsicoanalista

Además, indica que el uso de los videojuegos incentivan capacidades que se pueden utilizar hoy día en la telemática, disciplina que conjuga lo científico con la tecnología.

“A partir de los videojuegos los chicos están entrenando para el uso de la telemática, los especialistas que están manejando los rovers en Marte, le apuesto que usaban videojuegos y ahora lo que están usando es esa capacidad para mover un cochecito en el planeta rojo, y si es así, ahorita es muy probable que la realidad dentro de 15 o 20 años sea todavía más exacerbada en este sentido”, agrega el experto.

Moderar y evitar el exceso

Cuando el boom del tabaco llegó en el siglo XX, figuras artísticas publicitaban las marcas de cigarrillos como si fuera algo de élite o, incluso, saludable, pero llegaron las múltiples enfermedades terminales que causa el abuso de la nicotina y ahora en cada cajetilla aparecen leyendas advirtiendo los males de esta droga legal.

¿Acaso hay que implementar en el futuro frases de precaución en las portadas de los videojuegos? El neurólogo cree que si estos llegan al grado de la adicción, se debe prevenir a sus consumidores.

“Pues sí, a lo mejor algo como ‘este aparato puede dar algún tipo de adicción’, yo estaría de acuerdo de agregar leyendas preventivas”, dice Islas.

Pero el doctor también argumenta que si se usan las consolas cuidando los tiempos, no tiene necesariamente porque desarrollar problemas porque serían como cualquier otra actividad de esparcimiento.

“Los videojuegos son una especie de gimnasia mental, es como ir al cine, lo que sería un problema es la exageración, el uso continuo y cada vez con horarios más amplios, eso sería lo que produce adicción y lo que perjudica la salud”, concluye el especialista.

Para los especialistas, el uso moderado de estos equipos es un aliciente para la vida diaria y es mejor utilizarlos en familia

Atendiendo los síntomas

Ambos especialistas concuerdan en que hay al menos tres focos en los que se debe prestar atención en niños y adolescentes para evitar llegar al nivel de adicción a los videojuegos:

NIÑOS

> Irritabilidad al pasar más de 20 minutos usando videojuegos porque regresar a la realidad los frustra

> Se deja de tener ilusiones en torno a otras experiencias, como el deporte, amistades, o la familia.

> A escondidas de los padres comienzan a usar la consola y la prefieren sobre cualquier otra actividad

ADOLESCENTES

> Empieza el aislamiento social, se retraen de su entorno y su único tema son los videojuegos

> Se pueden manifestar problemas académicos, aunque en los peores casos hay quienes sobresalen en calificaciones y los padres no se dan cuenta

> Se abusa de los horarios del sueño, creando insomnio, todo por seguir en la dinámica de juego

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