Álvarez Icaza se pronuncia por retirar todas las placas con el noombre de Díaz Ordaz
El legislador sin partido, agregó que en otros países como Sudáfrica, Argentina o Chile. se han realizado los cambios de placas de dictadores o de perpetradores de violaciones a los derechos humanos, lo que ha permitido una profunda transformación de la reconstrucción social
Carlos SalazarEn el marco de la conmemoración de los hechos del 2 de octubre de 1968, el Senador Emilio Álvarez Icaza propuso retirar las placas con el nombre del expresidente Gustavo Díaz Ordaz de calles, plazas y avenidas, para ser sustituidas por otras para darle un nuevo significado a la placa y honrar el movimiento estudiantil.
“Se trata de resignificar la memoria, se trata de honrar la memoria de quienes ofrecieron su vida por la libertad, no reproducir una memoria autoritaria. Se trata de resignificar nuestros procesos sociales”, apuntó.
Asimismo, al referirse al retiro de placas con el nombre del Presidente Gustavo Díaz Ordaz de estaciones del Sistema de Transporte Colectivo Metro, recalcó que es importante no solo darle un nuevo sentido a la fecha, sino recordar el simbólico y constructivo proceso de la lucha contra el autoritarismo.
El legislador sin partido, agregó que en otros países como Sudáfrica, Argentina o Chile. se han realizado los cambios de placas de dictadores o de perpetradores de violaciones a los derechos humanos, lo que ha permitido una profunda transformación de la reconstrucción social.
“Lo que se quiere hacer es una memoria social para honrar a quienes lucharon por las libertades. ¿Y por qué queremos eso? Porque queremos que, en la batalla por la memoria, resignificar y poner un mensaje social de que no se va a volver a usar el poder así. Esa es una de las medidas de no repetición, esa es una de las garantías sociales de que como comunidad no permitiremos de que se vuelva a usar así”, detalló.
Por último, Álvarez Icaza señaló que el Senado de la República tendría que ofrecer una disculpa al pueblo de México ante su omisión en los lamentables hechos de hace 50 años.
“Tendría que ser una disculpa por lo que no hizo en el 68. Tendría que poner el ejemplo y mandar un mensaje como institución del Estado mexicano, que no actuó ante la violencia del Estado, que guardó silencio cómplice. El Senado de la República tendría que levantar su voz y poner el ejemplo, para Nunca Más la Brutalidad en contra de su pueblo”, declaró.