Arboleda: Abortan aprobación

El Cabildo sampetrino abortó a última hora la aprobación del megaproyecto inmobiliario Arboleda.

La decisión crucial fue aplazada, luego de revelarse el conflicto de intereses del síndico Guillermo Montemayor Cantú, quien es uno de los principales promotores de esta ambiciosa obra.

El dictamen para regularizar y ampliar el permiso a este complejo de usos mixtos, que se ubica en una de las zonas con mayor plusvalía en San Pedro, se bajó ayer de la orden del día del órgano colegiado.

La autorización que requiere este desarrollo para construir 670 departamentos en lugar 270 permitidos, se encontraba entre los puntos que se someterían a votación en la sesión, pero esta decisión crucial para San Pedro fue excluida ayer y aplazada sin una fecha determinada.

Arboleda es un conjunto que se edifica en el cruce de las avenidas Ricardo Margáin y Roble, en la zona del Campestre, y busca ampliar su densidad en una de las áreas más exclusivas en la ciudad, pero también con mayores problemas viales.

El proyecto es promovido por el síndico Montemayor Cantú, presidente de la Comisión de Desarrollo Sustentable de San Pedro, quien sería el integrante del Cabildo que propondría votar el tema ayer.

Reporte Indigo publicó esta semana que el caos urbano y los permisos irregulares de construcción tienen un aliado en el Cabildo sampetrino: el síndico Montemayor Cantú, quien a su vez es socio del despacho de abogados Santos-Elizondo.

Arboleda no fue incluido en los 17 dictámenes de Desarrollo Urbano que fueron votados ayer.

El alcalde Ugo Ruiz afirmó que el asunto se excluyó porque la figura de “Complejo Habitacional” aún no está contemplada en el Reglamento de Zonificación y Usos del Suelo de San Pedro, aún en vías de modificarse.

“Por eso lo estamos estudiando”, dijo el munícipe al final de la sesión.

A diferencia del edil, Montemayor Cantú señaló que la discusión del expediente no estaba contemplada desde un inicio en la orden del día, la cual fue circulada entre los integrantes del Cabildo desde el viernes pasado.

Sin embargo, el alcalde confirmó que aún no existe la certeza jurídica del proyecto, porque este tipo de conjuntos sólo están contemplados en la Ley de Desarrollo Urbano del Estado y aún no en la normativa municipal.

“Seguimos en estudio del caso en particular y, hasta estar seguros de lo que vamos a hacer, programamos la fecha”, expresó.

Representantes ciudadanos de San Pedro censuraron la intervención del síndico en este proyecto inmobiliario, debido a que está en un claro conflicto de intereses.

Gilberto Marcos, presidente de la Federación de Colonias Metropolitanas, y Tatiana Clouthier, integrante de la asociación Evolución Mexicana, manifestaron que la administración debe excluir al funcionario en la discusión del asunto.

Marcos comparó la potencial autorización de Arboleda con el caso polémico de Walmart, en la avenida Gómez Morín, permitido durante la gestión del exalcalde Fernando Margáin.

Por otro lado, Clouthier advirtió que el síndico debe separarse temporalmente de su cargo, mientras se resuelven los temas en los que está involucrado como promotor inmobiliario.

Montemayor Cantú respondió a los cuestionamientos de los ciudadanos.

“Les digo a ambos: estén tranquilos, no hay tal cosa, cuando ha habido algún conflicto yo, efectivamente, me he abstenido de participar”, dijo.

En ese sentido, Ruiz señaló que la actuación del funcionario no está comprometida y que sostuvo conversaciones con el abogado para verificar que no va a tener una intervención en este proyecto en particular.

“A mí me ha dicho un tema muy claro, que no hay tal conflicto al momento de asegurar que hay una asesoría del despacho”, apuntó el munícipe sampetrino.

‘Soy un promotor de la economía’

El síndico Guillermo Montemayor Cantú negó que el despacho Santos-Elizondo, en el cual es socio, represente legalmente los intereses de los desarrolladores de Arboleda.

“Falso que haya relación con el despacho, el despacho que tiene contratado esta gente es otro”, afirmó.

“Vinieron a solicitar (el apoyo) al señor alcalde y el señor alcalde dijo: ’Bueno, Memo, tú empieza a mover ya esto’. Y ha sido mi intervención, nada más”.

El funcionario manifestó que la densidad del conjunto sólo da para alrededor de 500 departamentos, y no hasta 670 unidades, como se ha dado a conocer.

Montemayor Cantú recalcó que el complejo fue aprobado desde la anterior administración del exalcalde Mauricio Fernández, y que aunque el Reglamento Municipal no autoriza este tipo de obras, sí las contempla la ley estatal.

“Todos mis dictámenes yo tengo la certeza, y tengo la tranquilidad, de que se están haciendo apegados a derecho, y ésta no va a ser la excepción”.

El síndico negó ser un cabildero inmobiliario y se calificó a sí mismo como un “promotor de la economía” y un facilitador del progreso de San Pedro.

“Niego categóricamente cualquier relación del despacho al que tengo el honor de ser socio, esto, manifestado por Ugo desde que estuvimos en la elección.

“Yo le salgo barato, a comparación de otros despachos que se les está pagando más de 1 millón y medio (de pesos). A mí no me van a pagar esa cantidad por los tres años (de la administración)”.