Manlio Fabio Beltrones, exdirigente nacional del PRI, aseguró que los puestos de primer nivel de gobierno no pueden ser asignados a la ligera, y que quienes aspiren al gabinete tendrán que ser personas preparadas para el cargo, y no aprendices.
“Nunca más, nunca más una escuela de aprendices. Eso es importante, si se llega al gobierno es para poder hacer funcionar al gobierno no para llegar a aprender a gobernar”, apuntó Beltrones.
Los señalamientos del exlíder priista pudieran tener una dedicatoria al actual canciller Luis Videgaray Caso, quien a su llegada a la Secretaría de Relaciones Exteriores el pasado 4 de enero dijo “no soy diplomático, vengo a aprender”.
El sonorense hizo esta aseveración durante su participación en el foro “Gobiernos de Coalición en la Ciudad de México”, organizado por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, en donde volvió a pronunciarse a favor de los gobiernos de coalición, y defendió la necesidad de que los miembros del gabinete sean ratificados por el Congreso y evitar así funcionarios improvisados.
“Las ratificaciones de los miembros del gabinete son importantísimas para darle calidad a los gobiernos. Hablamos de dos cosas, gobiernos de coalición para gobernabilidad democrática y ratificaciones para asegurarnos de la calidad, del conocimiento de quienes integren el gobierno”, agregó.
Beltrones, quien compartió panel con Porfirio Muñoz Ledo y con los académicos Luis Eduardo Medina Torres y Daniel Armando Barceló Rojas, destacó la necesidad de cambiar el régimen político en el país, el cual funcionó durante muchos años, pero cuyo modelo ha caducado.
“Estamos ante un régimen político agotado, y por eso, desde hace más de una década buscamos algo que lo enriquezca y que lo haga tener mayor contenido y fortaleza para la gobernabilidad democrática.
“Es un régimen político en el cual, el que gana, gana todo, los que pierden, pierden todo y se dedican a fastidiar al que gana. Eso es lo que tenemos que reconocer que está completamente agotado”, afirmó.
El político priista, uno de los principales impulsores de la figura del gobierno de coalición, aseguró que el actual sistema presidencialista funcionó durante años porque en las elecciones no había tantos partidos políticos, ni tanta fragmentación de votos.
Sin embargo, recordó que a partir de 1982 y en las elecciones presidenciales subsecuentes, los presidentes electos llegaron con cada vez menos respaldo en las urnas, lo cual ha hecho que se vaya perdiendo gobernabilidad e incluso legitimidad.
“La caída en lo que es el apoyo electoral de cada uno de los presidentes es evidente. Tenemos que construir entonces un nuevo régimen político que nos evite la colisión a la que vamos y yo creo que es, o gobiernos de coalición o ruta de colisión, y esa ruta de colisión la tenemos enfrente, la tenemos en el 2018.
“La figura de los posibles gobiernos de coalición, que lo único que pretenden es ampliar la base de apoyo del gobernante en turno”, puntualizó.
Asimismo, reconoció a la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México el haber incluido en la nueva Constitución local la posibilidad de formar los gobiernos de coalición, y se sumó a la inquietud de algunos legisladores en el sentido de no redactar de manera tan estricta las leyes reglamentarias.
“Aquí se trata de construir ese nuevo régimen político en el cual ya avanzaron poniéndolo en la Constitución. La ley reglamentaria no debe ser tan compleja. Yo coincido que la ley reglamentaria no debe de ser un cinturón que apriete, que deje todo a la ley y poco al oficio político, creo que los dos tienen que combinarse”, finalizó.