Comerciantes exigen a AMLO reapertura de la calle de Moneda; sus ventas se han desplomado

Los locatarios de la calle Moneda denuncian que sus comercios han ido a la baja desde que el Gobierno federal ordenó el cierre
Noemí Gutiérrez Noemí Gutiérrez Publicado el
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Luego de que la policía capitalina cerró la calle de Moneda a un costado de Palacio Nacional, comerciantes exigen su reapertura ya que durante tres días se han desplomado sus ventas.

En protesta, impiden el acceso a los funcionarios, trabajadores y visitas al recinto histórico.

Jorge Hernández Herrera, quién tiene un comercio en esta calle, criticó que son recurrentes los cierres peatonales en la calle de Moneda desde que llegó a vivir a Palacio el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

Propuso que se coloquen vallas a la mitad de la calle para controlar los accesos –como está en Corregidora donde llegan secretarios de Estado, empresarios, diputados, así como funcionarios de otros países– a fin de que puedan pasar compradores y paseantes.

“Que pongan una valla como en Corregidora, mitad para él y la mitad para la gente que realmente viene a comprar, los que vivimos aquí que podamos vender”, dijo.

“El presidente y sí lo digo a viva voz atiende a todos los legisladores de otros países por la calle de Corregidora, sus camionetotas ahí las trae, pero en calle de Moneda ¿por qué la cierra?, ¿quiero saber?”, cuestionó.

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Señaló que desde que López Obrador vive en Palacio Nacional cierran Moneda, pero dejan abierta la Calle de Corregidora, por lo que sus pérdidas son del 100 por ciento.

Desde el lunes a mediodía, la policía capitalina controla los accesos peatonales y vehiculares en la calle de Moneda para impedir que se instalen en plantón personas con alguna demanda como sucedió el domingo que colocaron casas de campaña a un metro de donde ingresan reporteros que cubren la mañanera y trabajadores.

En la calle de Corregidora se instalaron vallas a la mitad de la calle para controlar el paso vehicular y se deja el paso abierto a compradores. Fue en ese lugar que declaró John Kerry, enviado especial de Estados Unidos para el Clima, después de reunirse con el primer mandatario este martes.

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