Tras los fuertes sismos que azotaron a la República Mexicana este septiembre, los planes de austeridad para la reconstrucción comenzaron, politizando la ayuda y sacando provecho de la tragedia para conseguir votos, el Partido Revolucionario Institucional puso en la mesa una propuesta que desde hace años estaba ya en la opinión pública: la eliminación de los legisladores plurinominales.
Si desaparecen los 64 senadores, 200 diputados federales y más de 400 diputados locales elegidos por el principio de representación proporcional, el gobierno podría ahorrarse cada mes 83 millones 883 mil 996 pesos solo en sueldos de los legisladores, sin contar sus equipos, asesores, bonos e instalaciones.
La iniciativa no fue bien recibida por los dirigentes del Instituto Nacional Electoral (INE), el Tribunal Electoral Federal (Trife) y la Fiscalía Especializada para Atención de Delitos Electorales (Fepade), quienes rechazaron la propuesta del PRI.
Si la figura del legislador plurinominal desaparece, el PRI podría tener mayoría en ambas cámaras, silenciando a la oposición y a las minorías.
El sistema de legisladores plurinominales pretende que todos los partidos políticos, aunque no hayan obtenido la mayoría de los votos de los ciudadanos en las elecciones, tengan representación en las Cámaras del Congreso y en las legislaturas locales.
A 40 años de su creación mediante la Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procesos Electorales, el PRI busca tumbar lo que ellos mismos instituyeron en 1977 para introducir la representación proporcional de todos los partidos políticos.
En el foro por el 40 aniversario de la reforma electoral de 1977, el presidente del INE, Lorenzo Córdova, advirtió que la propuesta del PRI, afectaría la pluralidad, la equidad, en las contiendas y representaría una regresión.
“El pluralismo constituye parte de nuestra riqueza democrática, el financiamiento público hay que repensarlo; una cosa es racionalizar el dinero que la sociedad invierta en la política y otra es renunciar al mismo y con ello perder lo que desde hace 40 años se buscó conseguir”, dijo el titular del INE.
Para el titular de la Fepade, Santiago Nieto Castillo, lo del PRI, es “un discurso populista, demagógico e irresponsable”.
¿Por qué conviene al PRI?
Además de conseguir votos por la estrategia de austeridad y ayuda a los damnificados, el PRI es quien gana con esta propuesta, por eso la toman como bandera. Sin plurinominales ni financiamiento para los partidos políticos, el tricolor recuperaría su posición como el partido hegemónico del Estado y podría aprobar cualquier ley, así como unilateralmente definir la política nacional desde el Ejecutivo.
En las pasadas elecciones del 2015, el Revolucionario Institucional recibió el 31 por ciento de la votación. En la Cámara de Diputados, con todo y plurinominales, controla el 41 por ciento de las curules, no son mayoría por sí solos.
Si no existiera la representación proporcional, el PRI ocuparía el 53 por ciento de los escaños en San Lázaro, un 22 por ciento mayor al 31 original.
La figura del plurinominal da movilidad a las Cámaras. Entre pocas personas o cúpulas toman las decisiones principales y amarran acuerdos para que las iniciativas pasen o queden frenadas.
Este grupo de legisladores son casi siempre los mismos, brincan de escaños a curules entre cada Legislatura y fungen como coordinadores de partidos o presiden las Cámaras.
Académicos, especialistas y mismos legisladores opinan que la iniciativa del Revolucionario Institucional es una medida populista para llegar al voto de personas que no saben cómo se maneja el Congreso.
Para el analista político e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), José Antonio Crespo, lo ideal sería disminuir el número de diputados y senadores, pero no los de representación proporcional, sino los de Mayoría Relativa, así se ahorra y no se afecta la representación en el Congreso.
“Si se puede tener un Congreso más chico, por ejemplo, de 300, pero que haya por mayoría y plurinominales, el ahorro sería el mismo pero no se altera la fórmula de representación del Congreso, no se distorsiona. Lo del PRI es una medida demagógica desde luego, que mucha gente quiere quitarlos porque no entienden los preceptos de la fórmula”, agregó el doctor de historia.
Entre las ventajas de la figura de representación proporcional se encuentra el ingreso a las Cámaras de especialistas en ciertos temas específicos que difícilmente podrían ganar una elección por no ser políticos de profesión.
Por eso, idealmente, además de la representación de las minorías, el legislador plurinominal también funge como el representante de sectores específicos y necesarios, y poder legislar en dichas materias.
“A veces el plurinominal puede servir para meter gente que un partido considera que es bueno, que quizás no ganen una elección por su personalidad, por ejemplo los especialistas de ciertos temas, que los ponen a dirigir la Comisión del Medio Ambiente, de Salud, por ejemplo un médico, que aunque sea un médico muy bueno no para la plaza pública, porque no es buen orador, porque no es demagogo, pero es bueno para la Cámara”, opinó José Antonio Crespo.
Legislan con falta de preparación
Analizando el nivel de escolaridad de los legisladores se encontró que en el Senado hay cuatro legisladores plurinominales que no cuentan con estudios de licenciatura, como el líder sindical de la Confederación de Trabajadores Mexicanos y senador del PRI, Armando Neyra Chávez, que solamente cuenta con primaria, o la velocista del Partido del Trabajo, Ana Gabriela Guevara, con bachillerato.
En la Cámara de Diputados ocurre algo similar, hay 18 plurinominales que no cuentan con estudios universitarios; en el PRI, Oswaldo Guillermo Cházaro y Carmen Salinas del PRI, han cursado secundaria y primaria respectivamente.
En Morena se tiene a Modesta Fuentes y a Blandina Ramos que estudiaron hasta la primaria, o Irma López que llegó hasta la secundaria.
Para el investigador del CIDE este es el problema de que la ciudadanía no confíe en los legisladores plurinominales, la falta de preparación y de representación de sectores necesarios para el progreso.
“Lo malo es que la figura también se aprovecha para meter a gente cercana, a parientes, amantes, a líderes sindicales impresentables, entonces no debe de ir por ahí, y ese es el enojo con la gente por los plurinominales”, argumentó Crespo Mendoza.
Para esta crisis de representación, especialistas proponen la apertura de las listas.
“En ese sentido también se podría resolver, abriendo las listas, para que la gente sea quienes decidan quiénes entran y quiénes no, en muchos países donde hay pluris, como en los países europeos las listas están abiertas, así la gente puede decir ‘ese líder sindical no pasa’ o ‘esta persona no tiene nada que hacer en la Cámara’, como el enojo que hay con Carmen Salinas que quieren que se vaya a lo suyo, de esta manera la gente podrá decidir y mejorar los pluris”, propuso Crespo.
Reducir uninominales disminuiría gasto
Para el especialista John Ackerman, la vía para reducir el gasto debe de ser la disminución de uninominales y no de plurinominales, además de abrir las listas de candidatos. De esta manera se podrían distribuir los lugares plurinominales entre los candidatos uninominales que no ganaron sus distritos electorales y ser elegidos por la cantidad de votos que reciban, así, nadie ocuparía un curul o un escaño sin haber hecho campaña.
“La manera de elección de los plurinominales puede mejorar, hay una crisis de representatividad de la clase política con la sociedad”, escribió en una de sus columnas el académico.
Dentro del mismo Partido Revolucionario Institucional también hay voces contrarias, como es el caso de la corriente Democracia Interna, que en día recientes entregó una carta al líder nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, donde acusan al partido de revanchismo y retroceso.
“La propuesta parece un ajuste de cuentas de la cúpula tricolor en contra de los delegados de la Asamblea Nacional que impusieron un ‘candado’ para evitar que los plurinominales ‘brinquen’ sin hacer campaña. En su soberbia, la cúpula del partido, que no pudo contener la militancia que logró establecer la prohibición, ahora promueve su desaparición. Qué desvergüenza: sino son para la cúpula, que no sean para nadie. Ese es el mensaje para la militancia”, decía la carta.
La efectividad de los Pluri
La propuesta de la iniciativa del PRI representaría una nueva reforma a la Constitución que para el diputado del Movimiento de Regeneración Nacional y presidente de la Comisión para combatir el uso de recursos ilícitos en procesos electorales, Juan Romero Tenorio, está fuera de lugar y tiempo.
“El PRI lo representa como una bandera de demagogia política, es una bandera que no van a impulsarla además no tendrían posibilidad de hacerlo, tendrían que hacer una reforma constitucional y ahorita los tiempos que dicta la Constitución determina que no podrán hacerse cambios electorales iniciado el proceso, este proceso comenzó el 8 de septiembre pasado”, señaló el legislador.