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Los estatutos de ese instituto político señalan que, al momento del registro como precandidatos a un puesto de elección, los aspirantes deben haber solicitado licencia si tienen algún cargo partidista o de representación popular
Seis legisladores federales del PRI de Nuevo León interesados en alcanzar la gubernatura del estado, pidieron licencia a sus labores en el Congreso de la Unión.
Esto, luego de que el martes no se definiera al candidato que representará al tricolor en las próximas elecciones, mismo que se conocerá hasta el día del registro, el 14 de enero.
Las senadoras Ivonne Álvarez, María Cristina Díaz y Marcela Guerra, así como los diputados Héctor Gutiérrez de la Garza, Jorge Mendoza Garza y Pedro Pablo Treviño, pidieron licencia ante la Comisión Permanente, que las aprobó por unanimidad.
Los legisladores tuvieron que separarse de sus cargos para estar en condiciones de ser nombrados candidatos del PRI.
Los estatutos de ese instituto político señalan que, al momento del registro como precandidatos a un puesto de elección, los aspirantes deben haber solicitado licencia si tienen algún cargo partidista o de representación popular.
La designación del candidato a la gubernatura de Nuevo León se realizará el próximo 14 de enero, fecha en que también se llevará a cabo la próxima sesión de la Comisión Permanente, por lo que los aspirantes debían pedir licencia a sus cargos a más tardar este miércoles.
La desbandada de legisladores de Nuevo León ocurrió debido a la falta de acuerdo para decidir quién será el candidato del tricolor.
El martes pasado, todos los interesados en ser los abanderados del PRI a la gubernatura de la entidad se reunieron, en la Ciudad de México, con el dirigente nacional del PRI, César Camacho.
A la reunión acudieron también el gobernador de la entidad, Rodrigo Medina, el presidente del PRI de Nuevo León, Eduardo Bailey, y el representante del CEN priista, Félix González Canto.
Ahí, se acordó que sería impulsado un candidato de unidad que deberá ser apoyado por los otros aspirantes que se queden en el camino.
No se definió, sin embargo, quién sería el elegido, por lo que todos los aspirantes se mantienen a la expectativa.
A la reunión en la sede nacional del PRI acudió, además de los seis legisladores que pidieron licencia, el secretario de Economía del Gobierno Federal, Ildefonso Guajardo.
Asistieron también varios miembros de la administración estatal: Federico Vargas, secretario de Desarrollo Social; Juana Aurora Cavazos, secretaria de Educación; Adrián de la Garza, procurador de Justicia; y Jorge Domene, jefe de la Oficina Ejecutiva de la Gubernatura.
El programa de trabajo
En esta semana, antes de que se conozca al elegido, todos los aspirantes estarán elaborando su programa de trabajo para gobernar la entidad, pues es otro de los requisitos que el PRI exige a quienes se inscriban como precandidatos.
De acuerdo con la convocatoria, los aspirantes deberán comprometerse a solventar las multas y sanciones que se le impongan al partido por el mal uso de recursos o la falta de comprobación de los ingresos y gastos ante los órganos electorales.
Deberán estar dispuestos, también, a realizarse exámenes para comprobar que no son adictos al consumo de estupefacientes.
Junto a los aspirantes a la gubernatura de Nuevo León, pidieron licencia también los diputados del PRI por el estado de Jalisco Marco Antonio Barba y Sergio Armando Chávez Dávalos.
El primero, pretende alcanzar una diputación local en el Congreso de Jalisco, mientras el segundo buscará ganar la alcaldía del municipio de Tonalá, Jalisco.