Lento y difícil ha sido el camino de la desmovilización de los grupos de autodefensa en Michoacán.
A diez días de haber iniciado el proceso de desarme, aún son poco los municipios de Tierra Caliente que tienen en operación un destacamento de la Policía Estatal diseñada por la Federación, a la que se integran lentamente los civiles alzados.
La indefinición del líder fundador de las autodefensas, José Manuel Mireles para incorporarse a la Fuerza Rural Estatal, mantienen a la expectativa a más de 5 mil exautodefensas, los que podrían marcar y definir el rumbo del conflicto en Michoacán.
El líder de los civiles alzados asegura que sí realizará los trámites para integrarse a la policía rural, pero no da fecha para el evento.
“Estoy esperando la oportunidad de que ya me dejen en paz para poder registrarme también y a las escoltas porque es imposible que otra gente ande armada por todas las carreteras y a mí cada vez que paso por cualquier retén hasta me quitan los cartuchos que traigo por ahí tirados en el piso, que no son míos pero son de mis escoltas”, dijo en entrevista con la cadena Radio Fórmula.
Por su parte, de acuerdo al Gobierno Federal, Hipólito Mora inició los trámites para su registro como comandante de esta policía rural, pero aún no se incorpora.
“Nuestro compañero Hipólito se va a conducir por la legalidad, va a registrarse, a toda su gente también la va a incorporar a su policía rural, porque está demandando con justa razón una buena seguridad pública y una justa impartición de justicia”, señaló Mireles.
Se estima que menos del 10 por ciento de los integrantes de las autodefensas -que se alzaron has 15 meses para combatir a las células del crimen organizado- se han dado de alta en los cuerpos policiacos.
De los 27 municipios michoacanos con presencia de grupos de autodefensa, solo en tres de ellos –Tepalcatepec, Buenavista Tomatlán y Coalcomán- se ha logrado la integración de la Fuerza Rural Estatal.
De acuerdo al comisionado, Alfredo Castillo, se espera que antes de concluya esta semana se agreguen más elementos en los municipios de Apatzingán y Aguililla.
Al iniciar el proceso Castillo indicó que la Secretaría de Seguridad Pública del Estado tenía una lista de 2 mil 286 personas que aspiraban a formar parte de la nueva fuerza de seguridad en Michoacán.
A la fecha son 550 hombres y mujeres exautodefensas convertido a policías estatales.
El comisionado aseguró que la incorporación de Hipólito y Mireles a las Fuerzas Rurales dependerá de que la población de sus comunidades lo autorice.
“Si al final de cuentas, cuenta con el respaldo de la comunidad y es una persona que goza de sus derechos que le otorga la Constitución, como yo siempre lo he dicho, él tienen la posibilidad como cualquier otra persona”, dijo.
Castillo aseguró que no hay día de descanso en los operativos implementados en territorio michoacano en la búsqueda de Servando Gómez, alias “La Tuta”, líder del grupo delictivo de Los Caballeros Templarios.
Diferencias y acusaciones
En Michoacán no pasa inadvertida la discrepancia que mantienen José Manuel Mireles y el comisionado federal, Alfredo Castillo.
Sus divergencias fundamentales son en torno a la forma de alcanzar la pacificación en la entidad, lo que ha afectado la formación de los cuerpos de policía con exintegrantes de los grupos de autodefensa.
Aunque oficialmente, la lentitud de este proceso se atribuye a lo minucioso de la selección de los nuevos policías, en el que no no solo participa la autoridad federal, sino también los vecinos –como en Apatzingán- que proponen a sus mejores representantes.
Se busca a toda costa que en la nueva policía estatal no se infiltre el crimen organizado.
Sin embargo, la nueva Fuerza Rural Estatal no ha quedado excenta de acusaciones en ese sentido. A unos días de comenzar su operación los señalamientos por parte de la iglesia católica en la zona de Tierra Caliente han sido intensos.
Los sacerdotes José Luis Segura Barragán, de La Ruana en Buenavista Tomatlán; Salvador Gonzales y Gregorio López Jerónimo, de Apatzingán, han insistido en que un grupo de personas con nexos en el crimen organizado han sido dados de alta en la Fuerza Rural Estatal.
La Iglesia Católica en la zona de Apatzingán -primero en la voz del obispo Miguel Patiño Velásquez, y después del Padre Goyo- fue la primera que denunció públicamente los abusos del crimen organizado y del cártel que opera en la zona.
El obispo incluso tuvo que salir de la zona, en tanto que el Padre Goyo sufrió amenazas contra si vida.
Pero a la par de los señalamientos de infiltración criminal que hacen los líderes religiosos, desde el púlpito han exhortado a todos los ciudadanos de la zona de Apatzingán, para que se sumen a la Fuerza Rural, a fin de que se continué con la erradicación del crimen organizado en esa parte de Michoacán.
#YoSoyAutodefensa
El contrapeso en Michoacán
La postura del líder fundador de las autodefensas, José Manuel Mireles, de no respaldar las acciones del comisionado federal, Alfredo Castillo, en la integración de la Fuerza Rural Estatal, se sigue extendiendo.
En la zona de Tierra Caliente son miles de exautodefensas que se mantienen a la expectativa, antes de formar parte de la policía estatal que pretende la Federación para Michoacán.
El #YoSoyAutodefensa ha calado fuerte en la sociedad michoacana.
Ese ha sido el principal contrapeso a las acciones que realiza el Gobierno Federal en la entidad para lograr la desmovilización de los civiles armados.
El movimiento de Mireles, apoyado ahora por el líder Hipólito Mora, está secundado por la diputada Selene Vásquez Alatorre, a la que se le reconoce por su trabajo combativo, lo que ha hecho que el movimiento de oposición a las estrategias oficiales vaya en aumento entre algunos sectores de la sociedad.
Los “otros autodefensas” tendrán un encuentro nacional al que convocaron a las organizaciones sociales, defensores de Derechos Humanos, activistas y ciudadanos a asistir.
“Visualizar y crear conciencia de que el problema de Inseguridad Pública no es un asunto de Michoacán y que todos los ciudadanos tenemos que actuar como Autodefensas ante el vacío del Estado.
“Somos Autodefensas contra el secuestro, Autodefensas contra la trata de personas, Autodefensas contra el crimen organizado, Autodefensas de los Migrantes, Autodefensas de las empresas productivas”, indica el comunicado que señala al Polyforum Cultural Siqueriros como sede del encuentro.
El alcalde autodefensa
En un video difundido desde el exilio, el exalcalde de Tepalcatepec, Guillermo Valencia Reyes -quien asegura es perseguido por el comisionado federal Alfredo Castillo- se suma a la movilización de #YoSoyAutodefensa y se dice dispuesto a iniciar la lucha para acabar con los crímenes que dañan a la sociedad mexicana.
El exedil, de 33 años, tuvo que salir de Michoacán por las amenazas de muerte que pesaron contra él y su familia y ahora, desde alguna parte de Estados Unidos, le dice a Mireles: “Habemos muchos soldados puestos para entrarle a esta verdadera lucha que apenas inicia”.
Valencia Reyes asegura que los delitos contra la sociedad mexicana ya no se deben permitir y él mismo se dice víctima de esos delitos.
“Bastó solo la decisión del comisionado para que de manera ilegal me quitaran del cargo”.