Diputados de todos los partidos políticos, incluso de Morena, se manifestaron en contra de eliminar los “fines de semana largos” que propone el presidente López Obrador, por considerar que se afectará las actividades comerciales y turísticas del país.
El morenista Luis Javier Alegre Salazar, presidente de la Comisión de Turismo de la Cámara Baja, reconoció que existe preocupación sobre el impacto que podría tener la eliminación de “los puentes”, especialmente para el turismo interno del país del que viven más de 4 millones de mexicanos.
Señaló que esta industria ofrece empleo a dos sectores vulnerables de nuestro país: los jóvenes y las mujeres.
Abelina López, también de Morena, manifestó que eliminar los “puentes largos” perjudicaría a estados como Guerrero, donde el turismo representa el 76 por ciento.
“Nosotros vivimos del turismo, no podré avalar lo que afectara al estado”, advirtió.
La legisladora Alejandra García Morlan, del Partido Acción Nacional, se manifestó en contra de esta propuesta ya que este sector representa un motor para la economía, por la importante derrama la derrama que se genera, por ejemplo, en el estado de Guerrero.
Así que a nombre de la bancada del PAN y a nombre del sector turístico del país, nos pronunciamos en contra de la desaparición de estas fechas, que son los puentes largos que sirven para promover el turismo. Los números en cuanto a la economía del país, hablan por sí solos, hay desempleo, así que lo que necesitamos es seguir promoviendo el turismo y generar economía.
Coincidieron con el Presidente de la República en que es necesario que haya una recuperación de la conciencia cívica sobre los relevantes hechos históricos, pero señalaron que eso corresponde impulsarlo a la SEP.
Por ello, se manifestaron en contra de afectar al sector turístico, por lo que demandaron una reunión con el Secretario de Turismo, Miguel Torruco, y en una mesa de análisis conjunto buscar una alternativa para este tema.
Al respecto, la petista Clementina Marta Dekker Gómez, coincidió que es importante rescatar los días históricos y contribuir a que las nuevas generaciones sean conscientes de la historia de México, pero sin eliminar los fines de semana largos.
