El Congreso de la Ciudad de México no comprobó el gasto de más de un millón de pesos en el 2019 ni tampoco tiene cómo hacerlo.
A través de diversas solicitudes de información por mecanismos de transparencia, Reporte Índigo documentó que el departamento de Comunicación Social del Legislativo realizó un gasto superior al que puede acreditar.
Fuentes del Congreso aseguran que el millón no encontrado fue usado por diputados locales para acciones de propaganda que no se facturaron ni se pueden justificar porque se estaría comprobando que los legisladores usaron recursos no autorizados —aparte de sus prerrogativas y dietas— para su beneficio personal.
Información incompleta
De acuerdo con la solicitud de información con número de folio 5003000204418 realizada al Congreso a través del Sistema InfomexDF, el departamento de Comunicación Social del Congreso ejerció tres millones 281 mil 695 pesos durante el 2019.
Mientras que el oficio CCDMX/T/DGP/IL/0434/2020, elaborado por la Tesorería del Legislativo en respuesta a la petición de información 5003000020120, indica que durante el último trimestre del año, esta área gastó un millón 957 mil 714 pesos.
Lo anterior significa que el 59 por ciento del presupuesto de la Unidad de Comunicación Social para 2019, departamento que estuvo a cargo de Jorge Navarijo, fue gastado en la recta final del año.
Cabe señalar que se eligió dicho periodo para hacer la búsqueda de los documentos debido a que las fuentes consultadas apuntaron que fue en ese tiempo cuando sucedieron los gastos sin justificación.
En la misma solicitud también se pidieron los contratos de compras correspondientes a los últimos tres meses de 2019, pero tanto la Tesorería como la Unidad de Transparencia dijeron no contar con esa información
En el mismo oficio, la Tesorería especifica que el monto ejercido durante los últimos tres meses del año se gastó en octubre y diciembre; en noviembre no se hizo ninguna adquisición.
“No omito señalar que durante el mes de noviembre de 2019 no hay gasto bajo el concepto señalado (Comunicación Social)”, afirmó el extesorero del Legislativo local, Armando López.
Montos sin justificar
Reporte Índigo revisó el Portal de Obligaciones de Transparencia (POT) del Congreso y la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) en los apartados correspondientes a gastos en comunicación social y contratos celebrados, y no se encontraron acuerdos comerciales referentes a Comunicación Social en el último trimestre de 2019.
Ante esto se solicitó el desglose de los gastos del departamento en el periodo referido y el órgano legislativo respondió a la solicitud 5003000028520 con la entrega de una base de datos.
La información proporcionada indica que en noviembre de 2019 se realizaron 10 inserciones en medios de comunicación cuyo costo en conjunto ascendió a 767 mil 862 pesos; en diciembre y octubre no se hicieron gastos.
No obstante, esa información es contradictoria a la proporcionada en el oficio CCDMX/T/DGP/ IL/0434/2020 en el que el tesorero negó que se hayan hechos gastos en comunicación social durante noviembre.
Posteriormente, en los documentos CCS-IL-0088-2020 y OM/ CT/IL/484/20, Comunicación Social y la Oficialía Mayor, respectivamente, respondieron a la solicitud de información 5003000051720 en la que se pidió la entrega de los testigos de las inserciones.
En la respuesta, ambas unidades entregaron 10 testigos y 10 facturas correspondientes a las inserciones en diversos medios realizadas en noviembre del año pasado y que suman 767 mil 862 pesos, único monto cuyo ejercicio en el tercer trimestre de 2019 se pudo acreditar.
Sin embargo, ni en los portales de transparencia ni en los documentos proporcionados, el Congreso comprobó el ejercicio de un millón 189 mil 852 pesos faltantes.
El subejercicio y posible desvío del Congreso de la CDMX
Los gastos sin justificar son producto al subejercicio en el que varias unidades del Congreso, incluida Comunicación Social, cayeron durante el año pasado, indican trabajadores administrativos del Legislativo capitalino quienes prefieren no identificarse por temor a represalias.
Fundación Slim y Fideicomiso Fuerza México son las otras dos organizaciones que recibieron dinero, las cuales sí han informado cómo se ha gastado el recurso
El subejercicio es el gasto realizado en menor cantidad en relación con el presupuesto original y está relacionado con la falta de eficiencia económica y de capacidad en administración de recursos.
Una muestra de que hasta el tercer trimestre del año había subejercicio, es que el 59 por ciento del presupuesto de la unidad administrativa mencionada se gastó hasta el final del año.
Por ello, indican las fuentes consultadas, Comunicación Social buscó la forma de ejercer su presupuesto y fue entonces que otorgó a los diputados (no detallaron cuántos o de qué partidos) recursos para actividades de difusión.
Lo cual está prohibido, pues este departamento está encargado de administrar los recursos para difundir las acciones del Congreso, no las particulares de los legisladores.
“Se hicieron los gastos y las adquisiciones pero no hay las facturas porque estarían comprobando que favorecieron a algún diputado”, señalan.
