IEPC de Jalisco: el árbitro debilitado
El Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Jalisco salió debilitado del proceso de creación de nuevos partidos, pues ha generado la sospecha de que se rindió a la presión social y mediática que exigía la validación de Futuro: el presidente del IEPC modificó de última hora su dictamen negativo para optar por uno positivo
Luis HerreraLa aprobación de Futuro como un nuevo partido político de Jalisco tuvo costos serios para el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado (IEPC), pues ha quedado bajo sospecha de haber modificado su resolución solo para apaciguar la presión social y mediática que se había generado sobre él.
Este 18 de septiembre el IEPC de Jalisco aprobó el registro de dos nuevos partidos estatales: Hagamos, al que se le identifica con el grupo político que controla la Universidad de Guadalajara; y Futuro, la nueva plataforma política de Pedro Kumamoto Aguilar, quien fuera diputado independiente local.
Sin embargo, fue la autorización de Futuro la que le ha traído críticas al IEPC y especialmente a su consejero presidente, Guillermo Amado Alcaraz Cross, pues éste sustituyó sorpresivamente y de última hora el dictamen que había elaborado sobre el caso, y en el cual se le negaba el registro a esa agrupación por la detección de financiamiento irregular; fue así que presentó un nuevo dictamen favorable a Futuro.
Al menos desde un día antes de la sesión en que el IEPC definiría el registro de esas agrupaciones, se filtró a comentaristas, medios y en redes sociales el dictamen que había elaborado el consejero presidente del IEPC, y en el cual se concluía: “Se considera que la solicitud presentada por la organización ‘Somos Un Bosque A.C.’ (Futuro) para constituirse como partido político local, no cumple con los requisitos exigidos, en consecuencia; no resulta procedente otorgar el registro”.
El dictamen de Alcaraz Cross generó un alud de cuestionamientos en redes sociales, de los que algunos trascendieron a la prensa, incluyendo los de quienes se iban a ver directamente afectados por esa determinación: los miembros de Futuro, como el mismo Kumamoto Aguilar, quien dijo el 17 de septiembre:
“En @FuturoJal entregamos todos los requisitos y más, con honestidad y gracias al trabajo titánico de miles de personas. Estaremos atentos a la sesión, a la espera de la resolución del IEPC y de que las consejeras/os estén a la altura de la democracia y la ley. Nosotros cumplimos“.
Lo cierto es que ya durante la sesión del 18 de septiembre del IEPC, y a poco de que esta concluyera, el consejero presidente, Alcaraz Cross, pidió la palabra para anunciar: “Quisiera manifestar que el acuerdo, o el proyecto de acuerdo que fue notificado, en este momento será sustituido”.
Cambio de dictámenes
El dictamen que había elaborado el consejero presidente del IEPC, y que promovía hasta antes de que éste fuera filtrado, negaba el registro a Futuro debido a que había detectado aportaciones irregulares por 22 mil 250 pesos, así lo plasma:
“Reporta aportaciones de simpatizantes en efectivo, por la cantidad de 33 mil pesos, mismas que omite sustentar con el soporte documental correspondiente, sin embargo, de la verificación al estado de cuenta se advierte el origen por la cantidad de 10 mil 750 pesos; por lo tanto, las aportaciones en efectivo de personas no identificadas son por la cantidad de 22 mil 250 pesos”.
Basándose en las fechas en que se dieron esas aportaciones irregulares, y el costo promedio de cada asamblea de afiliación celebrada por Futuro, el dictamen concluía que debían anularse tres de éstas, ya que se habían realizado inmediatamente tras la obtención de esos fondos indebidos, así lo indicaba:
“Considerando que a criterio de este consejo cuando los recursos provenientes de personas no identificadas exceden el 25 por ciento de los recursos reportados por una organización en proceso de constitución como partido político estatal respecto del costo promedio por asamblea celebrada, estaríamos ante un comportamiento que incide de manera significativamente alta y determinante en la capacidad de realización de ésta, lo procedente es tener por no válidas las asambleas celebradas por la organización ‘Somos un Bosque’ en los municipios de Ejutla, Tonaya y Colotlán”.
Así, Futuro pasaba de 85 asambleas válidas a solo 82, siendo el mínimo requerido 84. El dictamen aplicaba una segunda metodología que también resultaba desfavorable para Futuro, partía de lo siguiente: Futuro gastó en total un millón 040 mil 215.66 pesos para celebrar 87 asambleas totales, por lo que los 22 mil 250 pesos irregulares representaban el 2.13 por ciento de esa bolsa.
Por lo tanto, si se anulaba el 2.13 por ciento de esas 87 asambleas, Futuro perdía dos de ellas, pues: “Nos conduce a considerar el impacto directo de dichos recursos en la capacidad operativa de la organización ‘Somos un Bosque’ en una asamblea en su totalidad y en el 80 por ciento de otra”.
Así, Futuro pasaba de 85 asambleas válidas a solo 83, por lo que: “En ambos escenarios, no podríamos sostener la validez de las asambleas suficientes para otorgar el registro”.
Consejero del IEPC recula
Finalmente, para recular de su dictamen original, y proponer otro favorable a Futuro, el consejero presidente argumentó que había tenido acceso a información adicional que señalaba que Futuro había realizado asambleas que no alcanzaron quórum, y que no había contemplado en su dictamen, pese a que habría sido en estas en las que se usó el dinero irregular:
“Sin cambiar mi convicción sobre una relación causal que existe entre la aportación de un monto y una asamblea, esa relación se da a partir de la inmediatez en que sucede precisamente esa aportación y la celebración de esa asamblea. El análisis que esta presidencia realizó para efecto de llegar a esa conclusión lo hizo a partir del dictamen que emite el INE, sin reparar que este dictamen solo contempla aquellas asambleas que alcanzaron quórum originalmente; en ese caso, no se encuentran incluidas todas aquellas asambleas que, habiendo sido organizadas sin alcanzar los quórums, no formaron parte de este dictamen”.
La “relación causal” entre las aportaciones irregulares y las asambleas válidas, concluyó: “ya no existe (…) en virtud de que ese recurso que se recibió se gastó en la inmediata posterior y que no es precisamente la que aparece dentro del dictamen como válida”.
No hizo referencia, empero, a la segunda metodología del dictamen que también desfavorecía a Futuro.