Llega tarde a desplazados
A casi 10 años del comienzo de la lucha frontal contra la delincuencia organizada, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se pronuncia por los desplazados internos en México.
Los desplazados son los que tienen que dejar su comunidad, a veces sin poder llevarse siquiera sus pertenencias, por amenazas o agresiones, principalmente de la delincuencia organizada.
A casi 10 años del comienzo de la lucha frontal contra la delincuencia organizada, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se pronuncia por los desplazados internos en México.
Los desplazados son los que tienen que dejar su comunidad, a veces sin poder llevarse siquiera sus pertenencias, por amenazas o agresiones, principalmente de la delincuencia organizada.
La CNDH presentó su primer informe en la materia con datos oficiales y de organizaciones. Calcula que hay al menos 35 mil víctimas de desplazamiento forzado, pero esto es sólo una muestra del gran problema que el Estado mexicano debe de atender a la brevedad.
La violencia impacta en un número indeterminado de víctimas y ha habido pocas acciones del Gobierno federal y de la sociedad civil en apoyo a la gente que tiene que dejar su casa y su estilo de vida para migrar ante la violencia, aseguró Édgar Corzo Sosa, quinto visitador general de la CNDH.
“La primera causa que genera el desplazamiento es la violencia e inseguridad que se vive en algunas regiones del país”, acotó.
Señaló que el gran problema de carácter nacional son las disputas entre grupos criminales, lo que repercute en parte de algunas comunidades que, ante la amenaza por agresiones o frente al reclutamiento forzado, optan por abandonar sus lugares de origen o residencia y trasladarse a espacios donde puedan sobrevivir en paz.
En tanto, el Informe sobre el desplazamiento interno (2016 Global Report on Internal Displacement) publicado ayer, refiere que de 2011 a 2015 se reportan 287 mil desplazados internos.
Tan sólo en el año 2015, la cifra de desplazados en el país es de 5 mil 600 mexicanos que dejaron su hogar principalmente por la violencia criminal en sus regiones.
En los casos de desplazamiento forzado interfieren diversos factores, desde levantamientos armados, pasando por catástrofes naturales o violencia entre grupos de la delincuencia organizada y levantamientos de grupos civiles como las autodefensas.
La CNDH pidió a los legisladores que se impulse un registro nacional y una ley general en materia de desplazamiento forzado interno, en la que se coordine el trabajo de los tres ámbitos de gobierno.
“El desplazamiento forzado interno en México es un problema cuya magnitud y alcances reales aún debe ser investigado y determinado de objetiva e integral”, explicó en conferencia de prensa el presidente de la CNDH, Luis Raúl González Pérez.
La CNDH pidió también un diagnóstico nacional para conocer el tamaño del problema y determinar cómo combatirlo.
“Es necesario que el Estado mexicano reconozca oficialmente la existencia de este problema, adopte una postura unívoca respecto del mismo y emprenda acciones específicas para su atención.
“Este es el primer informe que emite un órgano del Estado mexicano en torno al desplazamiento forzado en el cual se analizan sus causas, manifestaciones y principales problemáticas en nuestro país”, añadió González Pérez.
Se necesita más respaldo a víctimas
Entre los impedimentos para tener una cifra de desplazados acorde con la realidad, es que muchas de las víctimas no realizan denuncias y las autoridades, en caso de apoyarlas, únicamente dan asistencia.
La CNDH sugiere la aplicación de un plan para que las víctimas tengan respaldo oficial integral y se les apoye con empleo, techo, alimentos y trámite de documentación oficial, para lo que se requiere la participación de los tres ámbitos de gobierno con un enfoque tanto correctivo como preventivo.
El informe de la CNDH no toma en cuenta los casos en que los mexicanos salen del país debido a la violencia, por lo que el llamado a las autoridades es para atender el desplazamiento forzado interno. La Comisión presentó también una propuesta de protocolo de atención para estas víctimas.
La violencia de las pandillas y el narcotráfico, las principales causas en la región, han ocasionado que un millón de personas en Centroamérica y México dejen sus casas y lugares de origen, de acuerdo con un informe que revela que el conflicto colombiano sigue haciendo huir a miles.
El Informe mundial de desplazamiento interno, elaborado por un departamento especializado del Consejo Noruego de Refugiados (NRC), estimó que en 2015 hubo 27.8 millones de nuevos desplazados internos en el mundo por culpa de las guerras y la violencia, pero también por los desastres naturales.
“Dicho de otra manera, unas 66 mil personas abandonaron sus hogares cada día de 2015”, de acuerdo con el secretario general de esa organización, Jan Egelan.