Luego de sostener una reunión con el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Esteban Moctezuma, el líder de los diputados de Morena, Mario Delgado Carrillo, ratificó que no se subirá al pleno el dictamen de la nueva reforma educativa hasta que haya un acuerdo con el magisterio, aunque admitió que todavía hay diferencias con la CNTE en torno al documento.
Por su parte, la presidenta de la Comisión de Educación, Adela Piña Bernal; e integrantes del magisterio disidente, Delgado Carrillo reconoció que no han logrado convencer a los maestros por las muchas historias de traiciones y agravios que han enfrentado.
En entrevista, reiteró que el problema es que el tiempo se agota y el próximo martes se acaba el periodo ordinario de sesiones y de no transitar en esta semana, “pues va a quedar vigente la reforma de Peña Nieto y ese es el peor escenario porque se van a seguir acumulando tanto la falta de resultados como los agravios en contra de los maestros”.
No obstante, calificó la reunión con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) de muy buena, pues “se avanzó mucho en el tema que planteó el presidente de la República en el memorándum, el asunto de los presos políticos, de las indemnizaciones, la reinstalación de maestros que fueron injustamente despedidos por la actual reforma educativa y también algunos asuntos de agendas locales”.
Empero, subrayó que en el tema del dictamen que se tiene en la Cámara de Diputados persisten diferencias, “sin embargo, pues vamos a seguir trabajando para seguir construyendo”.
De acuerdo con Delgado Carrillo, las diferencias tienen que ver con los temas de derechos laborales, principalmente, aunque hay una gran coincidencia entre lo que plantean ellos y el presidente de la República, “es simplemente la diferencia en la forma de decirlo y cómo lograr esos objetivos”.
Por último, rechazó que esté en la mesa la entrega de plazas automáticas a los egresados de las escuelas normales, ”nadie está planteando eso”.