La Cámara de Diputados ha gastado más de nueve millones de pesos en pruebas que se han realizado a legisladores y demás personal, para detectar el COVID-19.
Dulce María Sauri Riancho, presidenta de la Mesa Directiva, informó que a la fechan han fallecido a causa del coronavirus 1 diputado del Partido Encuentro Social y 13 trabajadores administrativos.
En conferencia de prensa virtual, la priista dijo que se desconoce el número exacto de diputados que han resultado positivos a COVID-19, debido a que no todos lo dan a conocer.
Además, indicó que hay legisladores que se han negado a realizarse la prueba, por lo que se está generando un serio problema de salud en la Cámara de Diputados.
Sin embargo, Sauri Riancho dijo que no se puede obligar a los legisladores a que se realicen la prueba o que utilicen el cubrebocas, como el petista Gerardo Fernández Noroña que se ha mostrado reacio a utilizarlo.
Preciso que de acuerdo con información de la Secretaría General se han practicado 10 mil 267 pruebas COVID-19 en la Cámara de Diputados.
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Manifestó que las primeras pruebas que se realizaron para los dos periodos extraordinarios de sesiones tuvieron un costo unitario de mil 300 pesos, pero luego el precio bajo a 950 pesos, a partir del mes de septiembre, cuando arrancó el periodo ordinario de sesiones.
Dijo que los recursos para financiar las pruebas que cada semana se realizan en la Cámara de Diputados han salido de los ahorros que se han obtenido por el ahorro en agua y luz debido a la suspensión de actividades.
“Las pruebas en la Cámara son una necesidad porque requerimos, en la medida de los posible, garantizar la salud, no solamente de las y los diputados, sino del entorno en el que se desarrolla el trabajo, también de los trabajadores y empleados de la Cámara, entonces vamos a seguir haciéndolas cada semana para, pues, mínimamente, reconocer cuándo, alguno que pueda ser asintomático está transmitiendo el virus y necesita ser aislado”.
La diputada Sauri reconoció que se han relajado las medidas sanitarias al interior del recinto de San Lázaro.
“Es responsabilidad personal, entonces esa es nuestra realidad ahora, y con esto vamos a tener que trabajar hasta el 15 de diciembre porque no solamente de acuerdo a los informes que se están recibiendo, en el caso de la Ciudad de México la jefa de Gobierno ya ha mencionado que puede haber un retroceso en la apertura que ha tenido la Ciudad de México, no creo que vaya a ser como abril o mayo ¿no? pero sí que va a volver nuevamente haber una serie de restricciones”, comento la priista yucateca.