México ha ingresado al top 10 en un nuevo ranking mundial.
Nuestro país ahora es el séptimo país con mayor número de armas en manos de civiles.
Esto en una nación en que las restricciones legales para uso y portación de armas son consideradas de las más severas.
De acuerdo a cifras de la ONU, en México existen alrededor de 15 millones de armas en manos de civiles.
La guerra contra el crimen organizado ha desencadenado un flujo desmesurado de armas que provienen de distintos países.
Principalmente de Estados Unidos, pero también de Rusia, China, Israel y Alemania.
Para empresas como Smith & Wesson International, Colt Manufacturing Company (norteamericanas), Norinco (China), Izhmash (Rusia) entre otras, los conflictos armados alrededor del mundo resultan altamente redituables pues generan millones de dólares en utilidades por la venta de estas armas.
Y desde los inicios de este siglo, México ha resultado un mercado altamente atractivo.
El costo de las armas decomisadas es de 145 millones de dólares, y si partimos de la premisa de que por cada arma decomisada existen cinco más en manos de civiles, el monto del mercado mexicano sería de 870 millones de dólares.
Estas empresas no venden las armas directamente a los criminales, por lo que al distribuirse a través del mercado negro, las medidas regulatorias de los países involucrados no han logrado disminuir el flujo.
Por ello, los verdaderos ganadores de nuestra triste y cruel guerra contra el narco son aquellas empresas extranjeras dedicadas a la manufactura de fusiles y pistolas.
Es un hecho que desde hace siglos las guerras o conflictos armados producen una derrama económica importante. Además genera empleos y muchos alegan que fomenta el dinamismo económico de los países.
Algunos críticos han analizado el caso de Estados Unidos, Rusia, Inglaterra, Alemania e Israel como las súper potencias armamentistas.
Y es que en épocas de crisis económica las guerra entre naciones ha mantenido a flote a países como los que hemos mencionados.
La guerra contra el crimen organizado en México ha cobrado la vida de más de 50 mil personas. Y el gobierno mexicano ha invertido millones de dólares para contrarrestar el creciente poderío armamentista de los cárteles.
A casi seis años de haber lanzado una ofensiva militarizada contra las organizaciones criminales trasnacionales, México ha registrado una histórica espiral de violencia en donde el común denominador son los sangrientos enfrentamientos con todo tipo de armas de fuego.
Y es que hasta hace seis años la mayoría de las armas que el crimen organizado utilizaba eran armas cortas, es decir pistolas de diferentes calibres.
Sin embargo, diversos reportes gubernamentales y de organizaciones internacionales, revelan que a partir de 2006 el decomiso de armas largas en México incrementó.
La Sedena ha informado que al día de hoy ha logrado decomisar más de 140 mil armas en total, 14 millones de municiones y 11 mil granadas de fragmentación.
Es decir, el crimen organizado ha invertido aproximadamente 145 millones de dólares en armamento para combatir a las bandas antagónicas y al gobierno.
De éstas armas decomisadas por el gobierno federal se calcula que el 65 por ciento son rifles de asalto o armas largas, lo que representa un importante incremento en relación al decomiso de armas cortas.
Al estudiar los diferentes tipos de armas largas que los cárteles del narcotráfico han preferido, destaca la emblemática AK-47, comúnmente llamada el “cuerno de chivo”, hoy considerada un símbolo en la narco cultura mexicana.
Además el rifle de asalto AR-15 y sus similares como el M-16, M-4 etc.
Esto se debe en gran medida al incremento en la oferta de este tipo de fusiles de asalto en los Estados Unidos.
Otro factor que determina el incremento en el uso de armamento más pesado es que la competencia entre cárteles se elevó en la última década.
Y ante el acecho de las fuerzas armadas, el crimen organizado actuó como cualquier empresa multinacional, protegió sus inversiones.
Lo hizo empleando mayor capital humano, es decir, reclutó a criminales por todo el país. Y para garantizar su eficiencia, destinó millones de dólares a la compra de armamento más sofisticado y de mayor calibre.
Pronto, conforme la competencia se hacía más cerrada, no solo fueron pistolas y rifles de asalto: los cárteles hicieron uso de las redes criminales trasnacionales e iniciaron una campaña de “importación” y comenzaron a comprar granadas y lanzacohetes en Centroamérica.
Esto se refleja con las más de 11 mil granadas decomisadas a lo largo del sexenio, de las cuales más del 60 por ciento provienen de Centroamérica, según fuentes del gobierno mexicano.
El decomiso estimado de lanzacohetes (RPG por sus siglas en ingles) ha alcanzado las mil unidades.
Y aunque pareciera que es un número relativamente bajo, el hecho representa el grado de intensidad con que se libra la guerra entre carteles.
También, a lo largo de los cientos de decomisos los arsenales evolucionaron con otro tipo de armas que pueden ser compradas en Estados Unidos y que son sumamente mortíferas.
Tal es el caso de las ametralladoras calibre 40 mm y los fusiles Barrett calibre 50 mm, ambas capaces de atravesar los blindajes más gruesos y derribar aeronaves.
La mayoría de estas armas son de uso exclusivo del ejército según las leyes mexicanas, por lo que a lo largo del sexenio se han decomisado más de 91 mil armas largas.
El Banco Mundial estimó en el 2007 que el valor de la AK-47 era de 500 dólares en el país.
El costo de esta arma de origen soviético varía tanto en el mercado legal como en el mercado negro. Sin embargo, algunas firmas especializadas en seguridad estiman que el valor promedio de este fusil es de 800 dólares en el país.
La AR-15, tiene un valor estimado de 2 mil dólares por pieza.
Al agregar el valor estimado de 300 dólares para cada una de las más de 44 mil armas cortas de diferentes marcas que se han incautado, el valor de los más de 14 millones de cartuchos decomisados, y las más de 11 mil granadas, podemos estimar que el costo total de dicho arsenal, en cuanto a armas cortas, largas y municiones está por encima de los 145 millones de dólares.
El proveedor por excelencia
La guerra contra el crimen organizado ha puesto en evidencia un hecho que define la importancia que juega Estados Unidos en esta misión.
Mientras que las drogas fluyen hacia el norte de México, el dinero y las armas fluyen hacia el sur de los Estados Unidos, hacia México.
El Procurador General de Estados Unidos, Eric Holder, estima que en los últimos cinco años, alrededor del 70 por ciento de las armas que han sido decomisadas en México provienen de los Estados Unidos.
Mientras tanto, la oficina de Contabilidad Gubernamental de Estados Unidos estima que la cifra se acerca más al 87 por ciento.
Estados Unidos es un país que está armado hasta los dientes.
Se calcula que actualmente existen alrededor de 300 millones de armas en manos de civiles.
Es el país con mayor posesión de armas per cápita en el mundo.
La segunda enmienda de la Constitución de Estados Unidos establece que todos los ciudadanos tienen derecho a poseer un arma de fuego.
Sin embargo, con el tiempo, los ciudadanos no se conformaron con tener pistolas y rifles de cacería, y empezaron a comprar libremente rifles de asalto como los que utiliza el ejército.
Por ello, el Congreso aprobó en 1994 una ley temporal que prohibía la venta de fusiles de asalto en todo el territorio estadounidense. Pero esa ley expiró en 2004 y no ha sido renovada.
Sin embargo, pese a la presión ejercida por grupos que están a favor de la regulación de armas en su país y por el gobierno mexicano, esto no ha sucedido.
Quizá no sea falta de voluntad, pero dado que la industria armamentista estadounidense es la más grande del mundo, hace valer su enorme poder político.
Y también está la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés), dirigida por el ultraconservador Wayne LaPierre, organización no gubernamental especializada en cabildear a favor de la posesión de armas en Estados Unidos.
Esta organización cuenta con el poder político y mediático necesario para hacer perder a cualquier político que esté a favor de la regulación de armas.
Hoy en día existen alrededor de 8 mil 500 tiendas de venta de armas en California, Arizona, Nuevo México y Texas.
Tan solo en Arizona y Texas existen cerca de 7 mil armerías con licencia federal.
Y se estima que el 50 por ciento de las armas que cruzan la frontera hacia México provengan de estas tiendas.
En Estados Unidos es legal comprar armas como un rifle automático AR-15, con tal de tener la mayoría de edad y no tener expediente criminal.
Entre el 2009 y el 2010, de las casi 30 mil armas decomisadas, 20 mil provenían de ventas legales en Estados Unidos. En particular, 40 por ciento provenían de tiendas de armas en Texas.
Parte de la razón por la que ha sido muy complicado restringir el flujo de armas de Estados Unidos a México, es por lo rentable que es el negocio de las armas.
Un arma ícono
Fusíl de asalto soviético
Calibre 7,62 mm
Nombre: AK-47
Avtomat Kalashnikova inventada en 1947
Apodado ‘Cuerno de Chivo’ en México por los cargadores curveados.
— Mijaíl Kaláshnikov, soldado ruso de la segunda Guerra Mundial la diseñó en 1942, creó le primer prototipo en 1943 y tras ser elegido por el ejercito ruso lo rediseñó en 1947.
— La primer versión oficial de 1947 se inspiró en el estudio funcional del fusil Alemán Sturmgewehr 44.
— Rifle oficial de la URSS entre 1947 y 1978
— Se introdujo a gran escala en 1954.
— Arma reglamentaria por el Pacto de Varsovia para ejércitos orientales durante la Guerra Fría
— Los soldados estadounidenses en la guerra de Vietnam dejaban su M16 y utilizaban AK-47 que capturaban al enemigo. Esto fue prohibido ya que terminaban siendo víctimas de fuego amigo por la confusión del sonido de las armas.
— La distribución masiva en la Guerra Fría y la perdida de las armas por parte de fuerzas armadas aseguró en los setentas y ochentas un arma a cualquier luchador social.
— Es el arma de fuego más utilizada del mundo
— Aparece en la bandera de Mozambique, debiéndole el país a esta arma su independencia.
— Es un símbolo de insurgencia e insurrección popular.
— Diseñada basándose en las necesidades de la segunda guerra mundial
— Sus materiales y construcción son de bajo costo, haciéndola muy popular para militares y debido a su bajo mantenimiento, precio y fácil manejo es la más utilizada por fuerzas rebeldes o terroristas.
— Sobresale por su sistema de recarga de cartuchos: utiliza los gases explosivos del disparo para colocar el nuevo cartucho en la recámara del arma y expulsar el casquillo anterior.
— Se distingue por su cargador curveado hecho de aluminio y plástico, que lo hace práctico en espacios reducidos.
— Hace un distintivo ruido cuando el selector de tiro se cambia de la posición ‘seguro’ a ‘automático’.
— Puede alcanzar un blanco a 285 metros de distancia.
— Resiste cambios atmosféricos, golpes fuertes y ser sumergida debajo del agua.
— Hay en existencia entre 35 y 50 millones de AK-47 fabricadas legalmente.
— Se estima que existen entre 70 y 100 millones de AK-47 fabricadas ilegalmente en el mundo.
— En México no se utilizan de manera oficial por ninguna fuerza armada.
— Se capturan en grandes cantidades a la delincuencia organizada en México pero no son fundidos ni se vuelven a utilizar.
— Se compran en Estados Unidos por entre mil 200 y mil 600 dólares y se venden en México entre los dos mil y cuarto mil dólares.
— El 80% de los AK-47 que se decomisan en México provienen de Estados Unidos.
— Aparece su nombre con frecuencia en narco corridos y gangsta rap.
— Versiones populares: AKM, PA M1986, RPK, Tipo 56,Tipo 58
— Constructores de armas se inspiraron en su diseño para crear: Rk-62, AK-74, RPK-74, AK-103, IMI Galil, el INSAS, entre otras
— Ha sido producida por: Albania, China, Bulgaria, Alemania Oriental, Hungría, Egipto, Irak, Irán, Marruecos, Finlandia, Corea del Norte, Vietnam, Yugoslavia, Pakistán, Polonia, Rumania y Estados Unidos