Proponen 7 años de cárcel para quienes lucren con tanques de oxígeno en la CDMX
Se detalló que se busca que dichos abusos como en la compra y renta de tanques de oxígeno puedan ser catalogados como un delito
Indigo StaffLa diputada local de Morena, Esperanza Villalobos Pérez, propuso este miércoles en la sesión de la Comisión Permanente que se castigue con hasta siete años de cárcel a las personas que lucren con los tanques de oxígeno por la emergencia de COVID-19.
De esta manera, con la iniciativa de la legisladora morenista, se castigará con cárcel de cuatro a siete años y multas de 15 a 200 días de salario mínino a quien abuse por la venta o alquiler de tanques y concentradores de oxígeno.
De hecho, Esperanza Villalobos Pérez dejó en claro que si el delito se realiza durante una emergencia sanitaria, como la que se está viviendo en la Capital, las penas aumentarán hasta en una tercera parte.
El día de hoy envié ante la Comisión Permanente del @Congreso_CdMex:
-Una Iniciativa que busca reformar el Código Penal para el Distrito Federal, para aumentar las penas en materia de fraude tratándose de insumos y equipo médico como tanques y concentradores de oxígeno.
1/3 pic.twitter.com/53mQvnIURp— Esperanza Villalobos Pérez (@espevillal) January 20, 2021
La propuesta de Villalobos Pérez también reformaría el artículo 232 bis del Código Penal capitalino, pues se sancionaría a aquellos que cometen fraude con la venta y recarga de oxígeno, “pues se está atentando directamente contra la vida de las personas”, dijo.
Además, esta iniciativa fue presentada en sesión virtual del Congreso de la Ciudad de México, en la que se especificó la posibilidad de adicionar un Artículo 232 bis del Código Penal.
Si la conducta se realiza durante una emergencia sanitaria declarada por las autoridades competentes, las penas aumentarán en una tercera parte
Asimismo, por medio de un comunicado, Villalobos Pérez detalló que se busca que dichos abusos como en la compra y renta de tanques de oxígeno puedan ser catalogados como un delito.
También abundó que actualmente se requieren de más insumos médicos para combatir los síntomas que deja el COVID-19, por lo que lucrar en medio de la escasez y el aumento de la demanda se puede considerar un delito.
“Los síntomas graves del COVID-19 son dificultad para respirar o sensación de falta de aire, el dolor opresión en el pecho y la incapacidad para hablar o moverse, los cuales, si bien no son curados por apoyo de un tanque de oxígeno o de un respirador artificial, constituyen un aditamento fundamental para que las personas puedan seguir dando la batalla contra la enfermedad”, concluyó.
