La contaminación en el aire y su impacto en la salud de la población han sido dos factores que preocupan a los habitantes de Jalisco en los últimos años, sobre todo a raíz del incremento en los niveles de toxicidad en el aire de la Zona Metropolitana de Guadalajara.
Los más vulnerables a la mala calidad del aire son los más jóvenes, niños recién nacidos e infantes tan pequeños que son propensos a recurrir a los servicios médicos por enfermedades causadas a raíz de la exposición a la contaminación.
Datos obtenidos por transparencia en el expediente 320/2019, del Organismo Público Descentralizado de Servicios de Salud de Jalisco, revelan cómo de los egresos hospitalarios por infecciones respiratorias agudas, cerca del 35 por ciento de los afectados eran niños de 0 a 4 años de edad.
Quienes más padecen dichas enfermedades son los menores al año de nacidos, ya que representan el 20.91 por ciento de los afectados por infecciones respiratorias agudas que se atendieron en los hospitales de Jalisco, mientras que los niños entre uno y cuatro años son el 14.20 por ciento.
Un documento de revisión del Programa para mejorar la calidad del aire (PROAIRE) Jalisco 2014-2020 en el que se publicaron varias recomendaciones para lograr impactos en la calidad del aire de la Zona Metropolitana de Guadalajara, publicado en enero de 2018, advierte sobre los riesgos que representa la contaminación y su impacto en la salud.
“Los continuos episodios de contaminación del aire en el AMG se han convertido en el principal problema ambiental que aqueja a los habitantes y es por consiguiente un importante problema de salud pública”, concluye el documento del Gobierno de Jalisco.
En el mismo documento se ejemplifica la relación que existe entre entre la disminución de la función pulmonar en niños con su exposición al smog.
“La mortalidad infantil también se asoció con los niveles de bióxido de nitrógeno y ozono que hubo entre los tres y cinco días previos a la muerte (…). Estos hallazgos sugieren que la relación entre la mortalidad infantil y la contaminación del aire requiere de más investigaciones para identificar qué niños están en riesgo y de qué manera pueden prevenirse los efectos adversos”, señala el documento.
Las causas de la contaminación
El documento de PROAIRE establece que los principales problemas de contaminación en Guadalajara se deben a las altas concentraciones de ozono y partículas inhalables, éstas últimas cuyo nivel ha permanecido por arriba del límite anual de las normas mexicanas en la materia y de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud en los últimos años.
La proliferación y crecimiento industrial de la entidad está fuertemente ligado al incremento de la contaminación de la ciudad, ya que esta emite un gran número de gases contaminantes.
“Esta intensidad económica se ha vinculado con el aumento de emisiones contaminantes que deterioran la calidad del aire de esta zona. El aumento de la población y de las emisiones de contaminantes del aire han traído como consecuencia impactos importantes en la salud de la población”, señala el texto.
