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se han incendiado
en medio de las revueltas en tan solo tres días"Si ellos –el Ejército, la Marina o la Policía federal– se interponen en las acción encaminadas a desarticular en definitiva al cártel de los Templarios (...) esta vez vamos por todos los Templarios”
En Uruapan se han suspendido clases y en Zamora se interrumpió el servicio de las gasolineras
En Michoacán revivió la violencia. Al menos 13 grupos de autodefensas –que integra a más de 4 mil hombres armados- han reanudado su intención de exterminar a los grupos del crimen organizado. Se estima que al menos 11 células del cártel de los Caballeros Templarios mantienen una fuerte reacción en los municipios que mantienen bajo su control.
Frente a esta situación, el Gobierno estatal, en voz del propio gobernador Silvano Aureoles Conejo, ha manifestado su decisión de hacer respetar el estado de derecho: todos los civiles armados que se movilizan en la entidad son considerados como “objetivos delincuenciales”.
En ese sentido, el secretario de Gobierno, Adrián López Solís anunció que “la administración estatal que encabeza el Gobernador Silvano Aureoles Conejo, continúa con la estrategia integral de seguridad y da cumplimiento a órdenes de aprehensión contra objetivos delincuenciales”, que en otros términos son algunos de los jefes que encabezan el movimiento de las autodefensas.
La ejecución de las órdenes de aprehensión contra algunos de los líderes del movimiento de autodefensa es lo que de alguna forma ha desencadenado en la ola de violencia agudizada en los últimos tres días, luego de que los civiles alzados decidieran frenar el paso de las fuerzas federales a los municipios que mantienen bajo su control.
El resurgimiento de los grupos de autodefensa, se dio luego de reconocer que persiste la presencia y la reorganización de las células del cártel de los Caballeros Templarios.
En asamblea de jefes de grupos, las autodefensas decidieron que no bastaba con la intención del Gobierno estatal por mantener el estado de derecho, y optaron por la vía de la persecución directa contra las células del crimen organizado.
Desde el pasado fin de semana, en Michoacán se vive una ola de actos de violencia; en Uruapan se ha suspendido clases, en Zamora se interrumpió el servicio de las gasolineras, en tanto que en los municipios de la zona de Tierra Caliente –Apatzingán, Aguililla, Parácuaro, Buenavista, Tepalcatepec, La Huacana y Múgica-, se mantiene un virtual estado de sitio.
La quema de vehículos en la vía pública es el principal síntoma: en solo tres días de confrontación, se han incendiado 27 automotores.
La razón de los incendios, provocados por autodefensas y células del narco, es evitar el avance de las fuerzas federales que se han desplegado en la zona, tanto para ejecutar las órdenes de aprehensión contra los hombres ligados a las autodefensas como para detener a presuntos miembros del cártel de los Templarios.
Estado en vigilancia
La confrontación de tres bandos que se da en Michoacán, donde por un lado las autodefensas van contra las células del narco, y las fuerzas federales van contra todos los dos grupos de civiles armados, ha generado un estado de terror entre la población civil, lo que ha llevado a que la actividad económica en la zona de Tierra Caliente y en el norte del estado se haya reducido al mínimo.
No solo los actos de violencia se han generalizado en varios municipios. También se ha comenzado a hacer uso de técnicas de terror por parte de algunos grupos armados –no se saben si son autodefensas o miembros del crimen organizado-; un comando armado intentó quemar una tienda de autoservicio en Zamora.
Además una patrulla de la policía de Sahuayo fue emboscada por un grupo de pistoleros, los que rafaguearon la unidad, resultado gravemente lesionado un uniformado, lo que propició una movilización impresionante de los cuerpos federales de seguridad.
Frente a esta situación, el Gobierno estatal, con el apoyo de la federación, desplegó al menos 2 mil elementos del Ejército, Policía federal y Marina para mantener bajo vigilancia toda la zona de Tierra Caliente. La vigilancia se hace también desde el aire, con el apoyo de helicópteros artillados y del tipo Black Hawk, de los utilizados por el ejército de Estados Unidos en las zonas de conflicto del Medio Oriente.
Como parte de las acciones a realizar por parte del Gobierno estatal, para afrontar la crisis de seguridad que se vive en la entidad, se decidió la instalación de una base de operaciones mixtas en la localidad de Cenobio Contreras en el municipio de Apatzingán, sitio al que las fuerzas federales no han podido arribar –hasta el medio días de este miércoles-, a causa de los bloqueos carreteros con autos incendiados que se siguen presentando.
