Aunque no hay una postura oficial por parte del líder del grupo de autodefensas que encabeza Luis Antonio Torres, “El Americano”, entre los hombres que forman su grupo priva el convencimiento de negarse a la mesa de pláticas ofrecida desde la Secretaría de Gobierno de Michoacán.
Los civiles armados consideran que no existen condiciones para ello, luego de que en el mismo gobierno estatal se les ha clasificado como una extensión del Cártel Jalisco Nueva Generación.
En este grupo ha calado fuerte la declaración del gobernador Silvano Aureoles, quien refirió que algunos grupos de autodefensas han sido infiltrados por el crimen organizado, situación que es negada por los hombres que se encuentran apostados en algunas de las trincheras de la zona de Apatzingán, principalmente en la comunidad de La Ruana.
A la postura del grupo de autodefensas de “El Americano”, se ha sumado también el grupo de civiles armados que comanda Héctor Zepeda Navarrete, “comandante Tetos”, quien en una entrevista publica lamentó que el Gobierno Federal y el del estado de Michoacán se hayan olvidado de la cacería a los integrantes del cártel de Los Caballeros Templarios.
En cambio, dijo, a los grupos de autodefensa se les ha comenzado a perseguir. La muestra más clara de esta persecución, aseguró, es el desplazamiento de la policía militar que ya recorre los municipios de la zona de la Costa Sierra Nahua del estado.
Siguen el ejemplo
Otro frente de rebeldía de las autodefensas es el que ha abierto el fundador Hipólito Mora, quien por la vía política, alejado de las armas, insiste en que una comisión de senadores visite Michoacán para que conozca la realidad del movimiento.
Mora se ha convertido en la principal voz detractora de las acciones oficiales para alcanzar la pacificación del estado mediante el encarcelamiento de algunos jefes de grupo.
Temor al Mando Único
El nerviosismo que ha obligado a saltar nuevamente a las barricadas a algunos grupos de autodefensas surge de la decisión gubernamental de establecer el Mando Único de Policía.
Este modelo de seguridad pretende que todas las policías municipales sean sustituidas por Fuerzas Federales, lo que obligaría a las autodefensas, de por lo menos 13 municipios, a desplazarse fuera de las zonas urbanas.
El modelo de Mando Único se ha aceptado en solo 89 de los 113 municipios del estado de Michoacán.
En las localidades donde los grupos de civiles armados aún se manifiestan en pie de guerra, es donde los alcaldes se niegan a la presencia de las Fuerzas Federales para asumir el control de la seguridad pública local.
Mireles y Semeí, camino a la paz
Para el comandante Felipe, quien controla uno de los grupos de autodefensa que mantienen bajo su control una parte de la zona de Aguililla, la situación de guerra que vive la entidad podría recrudecerse en los próximos días si la Federación insiste en desplazar más Fuerzas Federales en los municipios controlados por los civiles armados.
La única posibilidad que él observa para que vaya a la baja la condición de guerra generalizada en el sur de estado, es la liberación del doctor José Manuel Mireles y del comandante Semei Verdía.
Por eso, aplaudió las acciones que desde la vida institucional intenta llevar a cabo Hipólito Mora, quien ha incluido en la agenda propuesta a un grupo de senadores la liberación del doctor Mireles, al que se sigue reconociendo en la mayoría de los grupos como el jefe del movimiento.
“Esa sería la primera muestra de voluntad del Gobierno Federal para terminar con la guerra”.