Los recursos no se han limitado por parte de la federación, pero las obras y servicios públicos han disminuido en más de un 90 por ciento
Al menos siete municipios de Michoacán no tienen alcalde.
Algunos ediles han huido ante la inseguridad, otros han sido expulsados por autodefensas y en algunos casos, los alcaldes electos o en funciones, enfrentan prisión por delitos federales relacionados con el narcotráfico.
Mientras esto sucede, el Congreso local ha sido omiso para restablecer el orden de gobierno.
La Comisión de Gobernación del Congreso, encabezada por el diputado priista Olivio López Mújica, se ha negado sistemáticamente a dar paso a los trámites de restitución de ediles.
En lo que va de la actual legislatura estatal, han sido al menos 10 notificaciones de regidores de municipios que presentan la ausencia temporal o definitiva del presidente municipal y reclaman medidas para remediarlo. La mayoría de las notificaciones han sido archivadas.
Sin embargo, los municipios con problemas de gobernabilidad no han dejado de recibir los fondos de participación federal y estatal que ascienden en promedio a 300 millones de pesos por localidad.
Y ante las ausencias de autoridad, el manejo de recursos se viene haciendo en forma discrecional por parte los encargados de la administración municipal, sin que haya exigencias específicas de parte de los diputados.
Y aunque los recursos no se han limitado por parte de la federación ni del municipio, en las poblaciones las obras y servicios públicos han disminuido en más de un 90 por ciento desde que se dio la ausencia de sus alcaldes.
Los corren o huyen, pero no gobiernan
Cabildos como los de Santa Ana Maya o Tanhuato tuvieron que enviar repetidas notificaciones al Congreso local sobre la ausencia definitiva de sus alcaldes –quienes perdieron la vida a manos del crimen organizado– antes de que se tomara la decisión de designar desde Morelia un presidente municipal interino.
En otros municipios, como en Tepalcatepec, el cabildo tuvo que pedir reiteradamente al Congreso, hasta en tres ocasiones, que se designara un alcalde interino, luego de que el electo, Guillermo Valencia Reyes, fue expulsado del municipio por un grupo de civiles armados, quienes finalmente lo obligaron a salir del país.
La designación del acalde interino de Tepalcatepec tuvo que ser motivada desde la Secretaría de Gobierno de Michoacán, y solo a petición del gobernador los diputados locales reaccionaron ante el conflicto que polarizó a los vecinos de esa localidad de Tierra Caliente.
El caso de Aguililla es de llamar la atención ya que tuvo que pasar casi un año –y la emisión de al menos tres declaratorias de ausencia del edil–, para que el congreso reconociera la necesidad de designar un alcalde interino que asumiera el control de la administración local, abandonada sin mayor trámite por el presidente municipal electo.
Ante la pasividad del Congreso Local, el alcalde Jesús Cruz Valencia estuvo “despachando” desde la ciudad de Morelia durante casi un año.
Desde ahí manejó los fondos de la Presidencia Municipal, sin reglamentación ni supervisión, ni llamadas de atención de la auditoria del estado.
Ahora Cruz Valencia está recluido en la cárcel federal de Tepic y el pasado fin de semana fue declarado formalmente preso y sujeto a proceso penal federal, acusado de los delitos delincuencia organizada y fomento al narcotráfico, por lo que finalmente se oficializó su separación formal del cargo.
Aun antes decretarse lo anterior, el alcalde salió de su localidad expulsado por los grupos de autodefensa, dejando de despachar en su municipio y suspendiendo obras y servicios a la comunidad.
Los diputados no hicieron nada por garantizar las condiciones de gobierno en esa localidad de Michoacán, en donde los regidores llevaban casi un año solicitando a los diputados del Congreso local la designación de un alcalde interino.
A la fecha los diputados no han emitido declaración alguna sobre el caso. En el congreso esperan que se les notifique formalmente de la detención del edil para iniciar el proceso de designación del interino.
Municipios sin ley
Los siguientes municipios michoacanos están sin gobierno por diferentes circunstancias. Mientras los recursos federales y estatales siguen llegando, el Congreso no toma medidas para nombrar nuevos gobernantes.
Santa Ana Maya Asesinado
Tanahuato Asesinado
Tepalcatepec En exilio fuera del país.
Interino no tiene apoyo del cabildo.
Aguililla Preso en Tepic por narcotráfico
Aquila Expulsado por autodefensas
Lázaro Cárdenas Preso en Mil Cumbres
Tacámbaro Bajo proceso penal por peculado
Apatzingán Preso por delitos federales
Tepalcatepec
En Tepalcatepec tuvieron que pasar al menos seis meses para que el Congreso local decidiera respaldar al Cabildo, desde donde se emitió el acta que daba cuenta del abandono del cargo por parte del alcalde Guillermo Valencia Reyes, expulsado de su localidad por civiles armados.
El edil de Tepalcatepec también estableció su gobierno en la capital del estado. Después anunció su exilio voluntario y actualmente está fuera de México.
El interino Sergio Rodríguez no cuenta con el apoyo del cabildo y no tiene acceso a recursos económicos.
Aquila
En el municipio de Aquila las condiciones no son distintas. El congreso no quiere reconocer los comunicados oficiales del Cabildo, que insisten en la ausencia del alcalde Juan Hernández Ramírez, quien tienen ya ocho meses sin ejercer su función, aunque no ha renunciado oficialmente.
Hernández fue expulsado desde el año pasado de su localidad. Lo acusaron de ser parte del crimen organizado y no lo han dejado gobernar los grupos de autodefensas, ahora convertidos en policías estatales.
Tacámbaro
Similar situación está ocurriendo en el municipio de Tacámbaro, en donde el alcalde Octavio Aburto Inclán se encuentra sometido a proceso penal por el delito de peculado.
El Congreso no ha designado un interino, pese la solicitud planteada por el cuerpo de regidores, en donde el síndico se hace cargo de la Hacienda Pública.
En Apatzingán, donde el alcalde Uriel Chávez Mendoza también fue recluido por delitos del fuero federal, el Congreso local no ha actuado.
La responsabilidad la asumió el propio Cabildo, quien determinó nombrar un encargado de despacho en espera de que el Congreso designe al responsable de concluir la administración municipal.
En total son al menos siete municipios michoacanos que tienen problemas de designación o ratificación de alcaldes interinos, todo derivado de la inestabilidad social que se vive en esas localidades con el surgimiento de las autodefensas y la lucha frontal al crimen organizado.
