Van por uso medicinal y amnistía
Permitir el uso medicinal de la mariguana y liberar a quienes se encuentren presos por consumir o portar cannabis, son los dos temas que podrían transitar entre las bancadas del Congreso de la Unión en estas semanas.
En la primera sesión de las audiencias públicas para las alternativas de regulación de la cannabis, diputados, senadores, especialistas y funcionarios coincidieron en la urgencia del debate de estos dos asuntos.
El consumo lúdico, sin embargo, podría toparse con la barrera de la mayoría de los legisladores que se oponen a su despenalización del uso recreativo.
Imelda García
Permitir el uso medicinal de la mariguana y liberar a quienes se encuentren presos por consumir o portar cannabis, son los dos temas que podrían transitar entre las bancadas del Congreso de la Unión en estas semanas.
En la primera sesión de las audiencias públicas para las alternativas de regulación de la cannabis, diputados, senadores, especialistas y funcionarios coincidieron en la urgencia del debate de estos dos asuntos.
El consumo lúdico, sin embargo, podría toparse con la barrera de la mayoría de los legisladores que se oponen a su despenalización del uso recreativo.
Ayer, el Congreso de la Unión comenzó un ejercicio histórico en el que ambas Cámaras discutirán todos los aspectos de una posible regulación del consumo de cannabis.
Durante tres semanas, especialistas y congresistas miembros del Consejo Técnico debatirán sobre el piso legislativo con el que se replanteará una nueva política de drogas en el país.
La salud no está a debate
El tema que tiene mayor consenso entre quienes trabajan por una nueva política del consumo de mariguana en México es el de la despenalización del uso medicinal de la mariguana.
El caso de la niña Grace Elizalde, que fue paradigmático en la división del debate de las diferentes formas de consumo de cannabis, abrió también el tema de ayer.
Previo a la inauguración de las audiencias públicas, Raúl Elizalde, padre de la menor, entregó a la Cámara de Diputados una carta con más de 150 firmas de personas cuyos hijos tienen problemas de epilepsia, para pedir que se legalice el uso de la mariguana medicinal.
“La salud no puede entrar a un debate, necesitamos leyes para que esto pueda tener un acceso sencillo, controlado por un médico y que sea algo constante, no complicadísimo”, afirmó Elizalde.
Su voz encontró eco tanto en el Congreso de la Unión como en el Ejecutivo.
Manuel Mondragón, titular de la Comisión Nacional contra las Adicciones, aseguró que el gobierno federal tiene abiertas las puertas de par en par para permitir que la cannabis sea usada con fines medicinales.
“El gobierno de México, a través del sector salud, está abierto totalmente a encontrar fórmulas que puedan demostrar y, en consecuencia aprovechar, a la cannabis como elemento terapéutico. Igual que ocurre con antimicrobianos, antiparasitarios, antinflamatorios, antibióticos, esteroides.
“Hay procedimientos abiertos para establecer, en un momento dado, la base científica y los estudios aleatorios, todo lo que se requiere para incorporar la cannabis en la forma que deba incorporarse (…) no hay razón para no aceptarlo”, expuso Mondragón.
Para lograr esto, México no entraría en conflicto con ninguna regulación a nivel internacional.
Antonio Mazzitelli, representante para México de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito afirmó que las convenciones internacionales no prohíben el uso de medicamentos que tengan como base la cannabis.
“Lo puedo decir aquí de manera más que oficial: todo uso de productos farmacéuticos a base de mariguana está permitido por las convenciones, es decir, los estados no tienen por que impedir la circulación y la utilización de medicamentos que puedan aportar un beneficio a quien hoy en día sufre”, afirmó Mazzitelli.
El diplomático sostuvo que el ejemplo más importante es el uso de la morfina, pues en todo el mundo no se utiliza suficiente morfina para dar una muerte digna a los pacientes.
Mazzitelli se pronunció por debatir no solo el tema de la mariguana, sino todas las drogas, pues no solo la cannabis es el problema en México y no solo los consumidores de ésta tienen derechos que deben reconocerse.
En el Congreso mexicano existen varias iniciativas para impulsar el uso medicinal de la mariguana.
Liberación de los presos
El nuevo enfoque del consumo de mariguana también podría tener efectos directos para aumentar la cantidad permitida del enervante y, con ello, provocar la liberación de miles de presos que están en la cárcel por ese delito.
Actualmente, en México solamente está permitido portar 5 gramos de mariguana sin que esto implique cometer un delito. Rebasar esa cantidad ya es considerado un crimen.
Para Juan Ramón de la Fuente, exrector de la UNAM e integrante del Instituto Aspen México, la modificación de esta cantidad podría tener un efecto directo en el acceso a la justicia en el país.
“Consumir drogas no es bueno, yo no lo recomiendo; pero quien las consume no es un delincuente, no es un criminal, no tiene por qué estar en la cárcel por ese hecho”, sentenció el académico.
En México, expuso, las dos terceras partes de los presos están en prisión por delitos relacionados con la posesión de cannabis; en el caso de las mujeres, la cifra sube al 80 por ciento.
Manuel Mondragón sostuvo que hay apertura para modificar los límites de cannabis que una persona puede portar y ello podría tener una consecuencia directa en las personas que son primodelincuentes.
“En México, ninguna persona por el solo hecho de consumir, debe estar en la cárcel. Punto. Si acaso está agregado al consumo otro elemento que tiene que ver con el narcotráfico, sí debe estar en la cárcel. Esa es la parte que hay que analizar, y esa es la parte que puede caer en la injusticia.
“Qué tanto trae la persona además de 5 gramos de mariguana, inclusive de medio gramo de cocaína o de 20 miligramos de heroína, etcétera. La tabla es toda. ¿Se puede modificar? Claro que se puede modificar. ¿Se puede ampliar? Claro que se puede ampliar. Habrá que analizarlo y discutirlo (…) Y si esto da oportunidad a que salgan muchas personas que están adentro, también enhorabuena”, apuntó Mondragón.
El comisionado se mostró a favor de que personas sin otro antecedente penal y detenidos por haber cometido delitos sin violencia, puedan abandonar la prisión con este cambio.
El panista Roberto Gil Zuarth, presidente del Senado, urgió a cambiar el enfoque para eliminar el prohibicionismo y cambiar así, de raíz, la política de drogas en México.
Uso lúdico, en duda
El tema más polémico y donde será más difícil lograr consensos es en el consumo lúdico de la mariguana.
Jesús Zambrano, presidente de la Cámara de Diputados, alertó sobre el bloqueo que podría tener la regulación del consumo de la mariguana en el Congreso y no solo para uso lúdico, sino también medicinal.
“Yo expreso mi deseo de que no vaya a haber una obstrucción, por decirlo de esta manera, por parte de quienes hoy se encuentran en el gobierno, y que tienen las bancadas más fuertes tanto en senadores como en diputados, porque ha habido un discurso que ha acentuado mucho, el de no uso, no levantar pues, las políticas prohibicionistas que hoy están establecidas”, alertó Zambrano.
El PRI ha presentado iniciativas para regularizar solo el uso medicinal de la cannabis; sin embargo, funcionarios del Gobierno federal –incluido el presidente Enrique Peña Nieto- han expresado su oposición a que la cannabis pueda ser consumida por diversión.
Grace Elizalde hace historia
Reporte Indigo publicó el caso de la menor regiomontana Graciela Elizalde Benavides, quien libró una batalla legal que desde el 20 de octubre pasado le permite recibir un medicamento hecho a base de cannabis.