[kaltura-widget uiconfid=”38728022″ entryid=”1_031hqaz1″ responsive=”true” hoveringControls=”false” width=”100%” height=”75%” /] El futuro gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, y quien será el representante en el estado del gobierno lopezobradorista, Carlos Lomelí Bolaños, mantienen viva su disputa a través de cinco procesos penales en marcha, derivados de la encarnizada batalla electoral que recién libraron.
Lomelí Bolaños y Alfaro Ramírez disputaron la gubernatura de Jalisco el 1 de julio como candidatos de Morena y Movimiento Ciudadano, respectivamente. Durante la campaña, ambos políticos intercambiaron múltiples denuncias penales durante con acusaciones mutuas muy serias de corrupción, sin que hasta ahora ninguno de los dos bandos haya anunciado su intención por desistirse de las mismas.
Los primeros saldos de la contienda electoral habían relegado a Lomelí Bolaños a una posición política muy secundaria tras su derrota, sin embargo, esto cambió radicalmente con su designación como coordinador estatal de Andrés Manuel López Obrador, convirtiéndolo en un actor fundamental para la gobernabilidad del estado.
Hasta antes de que fuera revelada la función federal que asumiría Lomelí Bolaños, aún podía escuchársele a Alfaro Ramírez, sin reparos, lanzar advertencias de lo que vendría para todos los involucrados en la venta de medicamentos a sobreprecio al sector salud.
“En específico lo que yo hablé es el tema de venta de medicamentos, de Pensiones del Estado, del saqueo al sistema de salud, y lo que yo quiero refrendar el día de hoy -se lo dije también al gobernador del estado- es: en el saqueo que se hizo al sector salud no va a haber ni perdón ni olvido, ni borrón ni cuenta nueva; va a haber investigación a fondo, va a haber denuncias y va a haber responsables que, estoy seguro, si en este estado caminamos por el sendero de la ley, habrá sin duda personas en la cárcel. No sé quiénes sean, eso ya será una tarea más adelante”, mencionó Alfaro el 6 de julio pasado.
Ante este tipo de declaraciones no se había dado una reacción contundente de Lomelí Bolaños, no obstante, tras el anuncio de su nombramiento como coordinador estatal, el morenista volvió a retomar su presencia en medios este 20 de julio, cuando explicó parte de la tarea que desempeñará en el cargo que lo colocó el virtual presidente electo.
“Ustedes saben que seremos responsables del Ejército, de la PGR (Procuraduría General de la República), de la Policía Federal y de lo que quede del Cisen (Centro de Investigación y Seguridad Nacional) (…) aquí hay un representante del Ejecutivo Federal que soy yo”, declaró Lomelí.
Futuro incierto
Los resultados que traerá al estado de Jalisco la nueva correlación de fuerzas entre el representante lopezobradorista, Carlos Lomelí, y el gobernador electo Enrique Alfaro, son de pronóstico reservado, aunque hay datos que evidencian la ascendencia que adquirirá el morenista.
Si como lo ha referido el propio Lomelí sus facultades incluirán la vigilancia directa del gasto federal en Jalisco, entonces tendrá incidencia sobre la aplicación de entre 80 y 90 mil millones de pesos que transfiere la Federación al Estado.
En 2018 el Presupuesto de Egresos del estado asciende a 108.3 mil millones de pesos, pero una parte mínima es recaudación estatal propia, y una gran mayoría proviene de la Federación, así se indica en el documento: “El gobierno obtiene ingresos propios que representan el 16.9 por ciento de los ingresos totales. Estos llegan de los Impuestos, Derechos y demás pagos que las empresas y que los ciudadanos como tú hacen”.
En el 2017, por ejemplo, con ingresos totales para el Estado de 110.5 mi millones d epesos, apenas 19.7 mil millones fueron producto de la recaudación estatal, otros 82 mil millones provinieron de fondos federales, y 8.8 mil millones de Financiamientos y remanentes.
El propio Lomelí Bolaños hizo precisiones sobre sus tareas, con múltiples referencias a su pasada campaña: “Implica que nos hagamos responsables de las 83 delegaciones, que supervisemos que los programas bajen adecuadamente, que haya total transparencia, que haya cero corrupción (…) para que el beneficio baje a todos los rincones de los 125 municipios. Como lo platicamos durante la campaña, para nosotros es muy importante que los programas sociales y la seguridad se retome en el estado”.
Discursos de batalla
La narrativa que han sostenido hasta ahora Alfaro Ramírez y Lomelí Bolaños no augura una relación tersa. El primero se dice firme en sancionar la presunta venta de medicinas caras a Pensiones por medio de la firma Abastecedora de Insumos para la Salud (Abisalud), la que se liga al morenista.
Sobre la acusación de los medicamentos el mandatario electo señaló “Ese será un tema que habremos de asumir en el ejercicio y en la responsabilidad del gobierno y como lo dije: no hay borrón y cuenta nueva en los temas de corrupción; no es amague para nadie, no es pleito con el señor Lomelí, pero se tienen que hacer las auditorias, se tienen que revisar las cosas, y si alguien cometió un ilícito, va a pagar las consecuencias de sus actos, eso fue lo que dijimos en campaña y es lo que vamos a sostener en el ejercicio de gobierno”.
Por su parte, Lomelí Bolaños ha evidenciado que asumirá un papel protagónico y mediático en el sexenio, disputando los reflectores con Alfaro Ramírez: “va a haber rueditas de prensa a las 6 de la mañana como Andrés, y que van a estar cordialmente invitados quien quiera ir; vamos a dar reportes diarios de cuál es la situación de la seguridad”.
O cuando se le preguntó qué pasaría si Alfaro Ramírez optaba por hablar directamente con el presidente, a lo que respondió: “Que lo busque, a ver si lo recibe, así de fácil. Andrés no es un hombre que simule, Andrés es muy claro, y el gobernador electo estará en la posición de buscar a quien él desee. Aquí hay un representante del Ejecutivo Federal que soy yo y si él quiere buscar al presidente que lo haga, no hay ningún problema, no hay ningún problema”.
Denuncias Carlos Lomelí VS. Enrique Alfaro
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Denuncias de MC VS. Carlos Lomelí
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