Después de la hazaña y ganar la gubernatura en Durango, el priista Esteban Villegas, tiene frente a él una misión todavía más complicada, plantarse como un mandatario de oposición, pero también conciliar con quienes no votaron por él, con Morena y con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Consciente de la labor titánica que tiene en frente, Villegas repite como mantra que la coalición Va por Durango ya hizo lo difícil, pero viene lo más complicado: la reconciliación.
“Quiero mandar un mensaje a los demás partidos políticos porque yo desde el primer momento hace seis años (cuando perdió la gubernatura) salí y reconocí el resultado y eran dos puntos de distancia. Es lo mínimo que Durango se merece, que nos pongamos a trabajar todos, que dejemos de lado la campaña, ya se acabó, el proceso ya pasó”, comenta.
“Es lo mínimo que Durango se merece, que nos pongamos a trabajar todos, que dejemos de lado la campaña, ya se acabó, el proceso ya pasó”
“El triunfo es irreversible” @EVillegasV se adjudica la victoria a la gubernatura de #Durango https://t.co/PFZb2L01O1 pic.twitter.com/ZB5srxi2Fu
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) June 6, 2022
Y es que a pesar de que el conteo rápido y el PREP le dieron la victoria por casi 15 puntos porcentuales en una de las contiendas con mayor participación en la historia de Durango, su contendiente de Morena, Marina Vitela, sigue sin aceptar la derrota.
Su último mensaje público dado a conocer en redes sociales fue para celebrar su presunta victoria.
La contienda en Durango fue reñida y en algunos momentos muy cerrada, pero escándalos como la presunta compra de votos y el hallazgo de 25 propiedades no transparentadas en su declaración 3 de 3, cavaron la derrota de Vitela.
En contraparte, el equipo de Esteban Villegas confiesa que siempre la consigna fue no cometer ningún error y aunque son enemigos naturales del PAN y del PRD, en esta ocasión el PRI tuvo que buscar ir en coalición para sobrevivir en uno de sus últimos bastiones.
Por eso el agradecimiento de Villegas, principalmente con el panismo de Chihuahua de Maru Campos, acaparó su discurso de victoria.
“Quiero reconocer y decirles que estoy verdaderamente comprometido con Acción Nacional y aunque no esté en la ley, vamos a gobernar en coalición.
“El país tiene que trascender a otro tipo de modelos que nos permita tener otro tipo de gobiernos, no solamente partidos, sino personas de la sociedad civil que son talentosos y que aman su tierra”, propuso el médico Villegas quien después de las pasadas elecciones se convirtió en el rostro del nuevo, nuevo PRI, uno dispuesto a negociar, conciliar y con una presunta apertura a las candidaturas ciudadanas.
Aunque muchos duranguenses ven ese discurso como un salvavidas y confiesan haberse quedado con las ganas de un cambio, consideran que les pudo ir peor.
El rostro de Esteban Villegas ya lo conocen, comulgan con sus ideales de trabajo duro, esfuerzo y una familia de catálogo. En quien no confían es en el PRI, ni en el PAN, ni en Morena.
La desconfianza también es hacia el presidente, los duranguenses saben que por ser gobernados por la oposición los han castigado en el presupuesto y han quedado en el olvido de las giras del inquilino de Palacio Nacional.
Por eso la recomendación a Villegas de Alejandro Moreno, presidente nacional del PRI.
“Te recomiendo una relación institucional, de respeto, clara, de frente al Gobierno de la República porque a partir de hoy serás el gobernador de todos los duranguenses y no le debes de fallar a quienes te dieron su confianza, pero también debes de ganarte a los que no votaron por nosotros”, le recomendó el hombre que dejó su gubernatura en Campeche para buscar la presidencia de su partido.
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