Documentos revelaron que el gobierno del estado pagó más de 7 millones de pesos por un software que permitía hacer labores de espionaje.
De acuerdo a Sin Embargo, archivos de la compañía Hacking Team comprueban que dio servicio a autoridades yucatecas.
Horas antes, fuentes oficiales de la administración negaron que tuvieran vínculos con la empresa que desató un escándalo internacional.
Sin embargo contratos y facturas comprueban que un proveedor que trabajó para el estado adquirió equipo que serviría para recoger información de equipos de cómputo y teléfonos móviles sin que el usuario se diera cuenta.
La triangulación por medio de intermediarios era una práctica común de la empresa Hackking Team ya que evitaba ser relacionada directamente con gobiernos para no ser acusada de espionaje.