La visita a Rusia que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner hace esta semana refuerza la cercanía de la mandataria argentina con su homólogo Vladimir Putin.

Además, Cristina fue a China en febrero y ha reiterado su apoyo al gobierno de Irán y al presidente Nicolás Maduro en Venezuela.

Esta política exterior de Argentina sufriría un giro drástico luego de las elecciones presidenciales del 2015 si la oposición consigue el poder.

En un encendido discurso pronunciado ante la Asamblea Legislativa de Argentina, la presidenta Cristina Fernández cuestionó duramente ayer al fallecido fiscal Alberto Nisman y calificó de “vergüenza” la denuncia que este hizo en su contra. 

Además, señaló que el fiscal cayó en contradicciones durante su investigación. 

“¿Con cuál Nisman me quedo? ¿Con el que nos acusa de encubrimiento o con el que se dirigía a mí reconociendo todo lo que habíamos hecho?”, se preguntó la mandataria.

El fiscal Gerardo Pollicita le dio voz a su excolega Alberto Nisman cuando el pasado 13 de febrero solicitó la imputación de Cristina Fernández por presuntamente encubrir a los responsables del peor atentado terrorista ocurrido en Argentina.

Sin embargo, ninguna de las hipótesis del fallecido fiscal convencieron al juez Daniel Rafecas.

Rafecas desestimó el jueves la denuncia. Dijo que “no están dadas las mínimas condiciones para iniciar una investigación penal” a partir de la denuncia presentada por Nisman el pasado 14 de enero, informó el Centro de Información Judicial.

¿Tiene razón el Papa Francisco en equiparar los problemas de Argentina con los de la violencia de México?

Aunque la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) mexicana reaccionó con indignación, el gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner desestimó las palabras de Francisco, quien alertó sobre la “mexicanización” de Argentina. 

El jefe del Gabinete presidencial argentino, Jorge Capitanich, expresó ayer que no le parece “relevante” la advertencia del Pontífice, pues el narcotráfico es un fenómeno de carácter mundial. 

Líderes mundiales y sudamericanos han arremetido contra el gobierno de la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner.

La inseguridad y la crisis diplomática de la nación rioplatense propiciaron críticas de parte del Papa Francisco y del presidente saliente de Uruguay, José Mujica.

Mientras el Pontífice alertó sobre la “mexicanización” de Argentina ante el incremento de la violencia del narcotráfico, Mujica reclamó que el gobierno de ese país “no aporta un carajo” a la integración de las naciones latinoamericanas.