Al igual que millones de estadounidenses, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, cree que el Internet no es meramente un servicio comercial, sino uno público.
El mandatario, por medio de un comunicado, extendió ayer su apoyo para reclasificar el servicio de Internet como un servicio público, lo que le otorgaría a la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) más poder de regulación y protegería la llamada neutralidad de la Red.
Bernhard Buntru