Contrario a lo que se piensa, no todos los adultos que viven con sus papás son un fracaso. Uno de los más grandes estigmas de la sociedad es que la independencia del hogar es una condición para conseguir el éxito. Sin embargo, existen varios casos famosos que prueban lo contrario.
Quizas el ejemplo más claro de esto es Steve Jobs quien, después de salirse de la universidad, vivió en la casa de sus padres y fundó su propia empresa en la cochera. De esta iniciativa nació Apple, que actualmente cotiza como una de las compañías más grandes del mundo.
Alejandro Dabdoub