En teoría, la Iglesia Católica no es partidaria de la homosexualidad. Sin embargo, desde que el Papa Francisco asumió el poder, este tema ha dejado de ser un tabú para los católicos. Incluso se ha demostrado una mayor apertura hacia el tema.
Durante la Jornada Mundial de la Juventud, que se llevó a cabo en Brasil el julio pasado, el Papa aseguró que el catecismo dicta que no se debe discriminar a las personas por su tendencia sexual.
“Si una persona es gay y busca al Señor, y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo?”, agregó.
Andrea B. Assunto