Los australianos Nick Kyrgios y Thanasi Kokkinakis vencieron a sus compatriotas Matt Ebden y Max Purcell 7-5, 6-4 el sábado en la final de dobles masculino del Abierto de Australia.
Son los primeros australianos que ganan el torneo desde la victoria de Todd Woodbridge y Mark Woodforde en 1997. Y coronaron una jornada de gloria para el país después que la victoria de Ash Barty en la final femenil del primer Grand Slam del año, con lo que puso fin a una larga sequía de 44 años, desde la victoria de Chris O’Neil en 1978.
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Kyrgios y Kokkinakis concedieron apenas dos sets en seis partidos en una trayectoria hacia el título en la que debieron vencer a los equipos preclasificados 1ro y 3ro.
“¡Qué semana! Puedo decir honestamente que no esperábamos llegar ni cerca”, dijo Kokkinakis. Por su parte, Nick aseguró que estaba muy contento por este logro y lo mejor de todo fue poderlo compartir con el público en casa, “No hubiera querido hacerlo con ningún otro”.
El primer set parecía avanzar hacia el inevitable tiebreaker sin siquiera un break point hasta el 11mo game con saque de Ebden, quien se defendió de tres break points hasta que una devolución de Kokkinakis forzó una volea de revés que se fue desviada, pero Thanasi sacó para ganar el set.
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El segundo set siguió una pauta similar.
Por pedido de todos los jugadores, un espectador que gritó “fuera” ante un saque de Purcell en el noveno game fue expulsado por los agentes de seguridad. El incidente de tres minutos solo demoró el desenlace inevitable cuando Kyrgios fue a la red para concretar la victoria en el siguiente set.