El fabricante británico de automóviles de lujo Rolls-Royce sumará una nueva línea de negocio que podría competir con la industria de transporte marítimo: barcos de carga no tripulados, que serán manipulados a distancia a través de un sistema de realidad virtual.
Estos “drones” marítimos o barcos robot no solo representarían una alternativa económica a los buques de carga tradicionales, sino que serían más seguros y amigables con el medio ambiente.
Según Bloomberg, el proyecto está a cargo de Blue Ocean, el equipo de desarrollo de la compañía, que está trabajando en un prototipo de realidad virtual que simula vistas de 360 grados desde el puente de mando de un barco, en su oficina con sede en Alesund, en Noruega.
Al reemplazarse ciertas instalaciones y sistemas para el mantenimiento del personal a bordo, como electricidad, aire acondicionado y los medios de desagüe, estos barcos automatizados serían 5 por ciento más ligeros antes de que se les incorpore el cargamento.
Y quemarían entre 12 y 15 por ciento menos de combustible.
De acuerdo a la firma de auditoría, consultoría y contabilidad Moore Stephens LLP, los costes de tripulación son de aproximadamente 3 mil 299 dólares diarios, es decir, 44 por ciento del total de gastos operativos de un barco de contenedores grande.
“Ahora la tecnología está en un nivel en el que podemos hacer que esto suceda, y la sociedad se está moviendo en esa dirección”, dijo a Bloomberg Oskar Levander, vicepresidente de innovación en ingeniería y tecnología marinas de Rolls-Royce. “Si queremos que la marina haga esto, es hora de moverse”.