El amor nunca perderá vigencia, es un sentimiento que, aunque se transforma, jamás desaparece. Eso lo tenían claro los actores Irene Azuela y Pedro de Tavira, quienes, a través de la obra de teatro Humedad, desarrollan desde diferentes personajes y etapas, los procesos que una pareja llega a atravesar en su relación.
De acuerdo con Pedro de Tavira, Humedad habla de tres parejas, dos en especial, que se encuentran por azares del destino en un lugar alejando, recóndito, donde todo el día está nublado y llueve ligeramente; “es un sitio sumamente extraño, raro y extranjero”, cuenta.
La pareja principal, según narra Pedro, está ahí por trabajo, él es un ingeniero que reconstruirá un puente que al parecer es milagroso. Con el desarrollo de la obra, el público nota que entre ellos no hay comunicación, que están tristes y metidos en una rutina.
Por otra parte, la segunda pareja llega al sitio por una cuestión climatológica, iban a hacer escala ahí, pero por cuestiones de lluvia deben quedarse, además de que sus maletas se encuentran perdidas; y aunque a primera instancia demuestran que estaban deseosos de pasarla juntos, viajando, en el cuarto de un hotel empiezan a sacar todo lo que tenían dentro uno del otro.
La pareja que cierra la obra, de acuerdo con la escritora de Humedad, Bárbara Colio, demuestra otra teoría de cómo puede llegar a ser una relación.
Pero antes de que ellos aparezcan sobre el escenario, múltiples palabras y actitudes son demostradas entre las dos relaciones anteriores.
“En el inter de la obra aparece una secadora que la primera pareja compra en la desesperación de tener ropa seca, de hacer algo nuevo, pues están tan estancados y aburridos que comprarse una lavadora les resulta algo sumamente excitante, innovador y refrescante”, platica De Tavira.
Es a través de la secadora, un objeto que parecería común para otros, pero no para estos personajes, que las primeras dos parejas empiezan a tener contacto, a partir de que desean estar secos y, a su vez, querer renovar su relación.
En entrevista, De Tavira asegura que, en pleno desarrollo de la obra es que gracias a la pequeña interacción que hubo con la máquina de secar, es que ambas parejas deciden intercambiarse, se vuelven swingers.
“Se intercambian por esta necesidad de buscar algo diferente, pero no hay un juicio de por medio, un código moral que diga ‘eso está mal’ (…) Eso es algo que no suelen tener los textos que hablan sobre pareja, aquí no hay un juicio, es el sólo hecho de plantearse ‘¿por qué no hacemos algo diferente para ver si así nos encontramos otra vez?’”, señala el actor
Finalmente, las dos parejas principales le exponen al público diferentes facetas de cómo puede resultar su relación si no se comunican con antelación, lo que realmente querían uno del otro y lo que esperaban que fueran con ellos.
La creación de Humedad
Matías Gorlero, director de la obra, confiesa que dede hace tres años se enamoró del texto de la dramaturga Bárbara Colio, pues había sido el único, desde hace tiempo, que le hacía plantear muchas cosas respecto a las relaciones de pareja.
Según cuenta el director teatral, cuando invitó a los actores, Azuela y De Tavira, a colaborar con él en esta puesta en escena, sabía que ellos tendrían una conexión innegable para los tres papeles que representarían en Humedad, pues “desde el primer ensayo, desde la primera lectura, hicieron click”.
De acuerdo con Matías, cuando ya era un hecho que llevaría el texto de la dramaturga al teatro, pensó en el nombre que le pondría y asegura que en la producción jugaron mucho con el título, hacia a qué los llevaba la palabra humedad; a la humedad de las paredes, del cuerpo, a qué ocurre cuando esa humedad ya no está y cuando las cosas se secan.
Para el actor Pedro de Tavira, puede que la gente, tras ver la obra de teatro, se dé cuenta de las facetas que tiene la humedad en una relación amorosa, como la que corrompe, la que desgasta y agrieta, la que echa a perder, o la que excita y lleva a la gente a hacer cosas que su código de ética le dicen que está mal, pero que desea hacer y no pasa nada.
Respecto a lo que la gente se llevará de la obra de teatro, el director, Matías Gorlero, destaca que seguramente todos saldrán húmedos de la puesta en escena, con una inquietud interna de en qué etapa de la relación se encuentran y cómo pueden mejorarla o terminarla.
“Es un tema serio, pero no lo abordamos con una seriedad profunda, sino con una profunda alegría”, detalla.
Para el director, el público saldrá de la obra con una inquietud sobre su relación amorosa
“La obra les dejará la reflexión de en qué momento de las tres parejas están y por qué, qué han hecho a lo largo de su relación para llegar a este punto y qué no han hecho. Pero más que una reflexión o un discurso, se trata de divertirse, de verse reflejado y confrontarse con uno mismo”, asegura De Tavira.
No te pierdas Humedad
La obra de teatro se presenta en el Teatro Helénico, los jueves y viernes a las 20:30, sábados 18:00 y 20:30 y domingos a las 18:00 horas, hasta el 7 de julio.
Los boletos tienen un costo de 450 y 200 pesos y están disponibles en la taquilla del Centro Cultural Helénico, ubicado en avenida Revolución 1500 y en la página de Internet www. helinico.gob.mx