En un mundo surrealista donde la soledad y el abuso son disfrazados por el juego y la inocencia, Aron y Emily, hermanos gemelos de ocho años, planean la poción perfecta para asesinar a sus padres, influenciados por un amigo imaginario sin brazos. De eso habla la puesta en escena Tili Tili Bom.
Durante la preparación, el público descubre los abusos violentos a los que son sometidos los niños, hasta que el juego de la poción da un giro insospechado donde la vida y la muerte se enfrentan. Ellos viven con una familia muy disfuncional, con una madre drogadicta y depresiva y un padre alcohólico que abusa de ellos sexualmente.
“Uno de los hermanos, Aarón, es un chico que anhela con todas sus fuerzas convertirse en mujer, mientras que Emily anhela salir de la casa y realizarse como mujer para ya no tener que ver a su padre nunca más, porque abusa de ella sexualmente”, platica Alan Blasco, autor y actor de la obra.
Tili Tili Bom está inspirada en una nota periodística sobre unos niños rusos que habían asesinado a sus padres, pero también cuenta con datos biográficos de Blasco, ya que el escritor quería utilizar el teatro como una voz para hacer una demanda, pero sin caer en el teatro de protesta.
A pesar de contar una trama muy dura, el equipo creativo buscó hacerlo de una manera muy poética y bella. Lo califican como un drama con tintes de thriller contado a manera de farsa.
El autor asegura que el público ideal para su trabajo son los padres de familia, los que quieren ser, los que son o los que ya fueron, porque, al final, el montaje es como una especie de espejeo que le permite a la gente ver dónde está parada como padre, lo que están haciendo bien o mal.
La obra abrirá su primera temporada en la Ciudad de México en el Teatro La Capilla (Calle Madrid, 13. Col. Del Carmen) todos los martes del 12 de noviembre al 17 de diciembre, a las 20:00 horas, con un costo de $250 general y $150 descuento para maestros, estudiantes e INAPAM.
La importancia de la infancia retratada en Tili Tili Bom
Alan Blasco recuerda un proverbio africano que dice “el niño que no sea abrazado por su tribu, cuando sea adulto quemará la aldea para poder sentir su calor”, ya que le hace mucho sentido, porque asegura que la infancia determina la adultez y de eso habla la obra.
“El daño a veces viene a proyectarse en la edad adulta o en cosas que uno no se da cuenta provocadas, sobre todo, por la soledad, porque en la infancia lo que necesitamos es la compañía, el amor y el cariño de tus padres”, opina el actor.
Alan Blasco escribió en ocho meses la obra, para después trabajarla con el Circulo Teatral, Alberto Estrella y Víctor Carpinteiro. Al presentárselas quedaron enganchados con el texto. El proceso, cuenta el autor, fue sumamente oscuro, de mucha investigación sobre Freud, el despertar sexual de los niños, los amigos imaginarios y la ausencia de los padres.
“El título del texto viene de una canción de cuna rusa. Cuando estaba investigando me topé con esta canción que al traducirla al español es muy tétrica, habla de un monstruo que te va a venir a comer y se llevará tu alma. A parte, la pieza está acompañada con guitarra eléctrica y bajo, que son instrumentos bastante pesados y en un momento de la obra los niños la cantan y la cantan”, platica el actor.
Tili Tili Bom tiene un poco de biográfica, por lo que actuarla para Blasco es muy fuerte, es cómo remover una llaga o abrir una ventana que ya se había cerrado hace mucho tiempo.
“Esto es algo que quería platicar desde hace años, pero no encontraba la historia para plantear esa parte. Soy abiertamente homosexual y me enfrenté al bullying, al rechazo paternal, al machismo, a la homofobia y se me hacía pertinente en estos tiempos ponerlos en escena para mostrar todo lo que afecta el rechazo de un padre machista hacia un hijo homosexual”, afirma Alan.
¡No te la pierdas!
Tili Tili Bom de Alan Blasco Teatro La Capilla (Calle Madrid, 13. Col. Del Carmen) Todos los martes, a las 20:00 horas del 12 de noviembre al 17 de diciembre Costos: $250 general y $150 con descuento