Los beneficios del yogur con probióticos van más allá de modificar la respuesta inmune del intestino, prevenir y tratar trastornos gastrointestinales.
De acuerdo a un estudio encabezado por el doctor Jing Sun, de la Escuela de Medicina de la Universidad Griffith, en Australia, el consumo regular de estos microorganismos vivos –en alimentos o suplementos– puede ayudar a disminuir la presión arterial alta.
Como parte de la investigación, cuyos resultados fueron publicados este mes en la revista científica Hipertensión, se analizaron nueve estudios sobre los vínculos del consumo de probióticos con la presión arterial.
En los nueve estudios participaron 543 adultos con hipertensión o con presión arterial normal.
Se encontró que las personas que incluían los probióticos en su dieta tendían a gozar de una menor presión arterial que aquellos que no los consumían.
El consumo de probióticos en una frecuencia menor a dos meses no arrojó reducciones en las lecturas de presión arterial que fueron realizadas a los pacientes.
De acuerdo a los investigadores, los beneficios de los probióticos parecían ser mayores entre las personas que tenían una presión arterial por encima de 130 sobre 85 milímetros de mercurio (mmHg).
Además, se observó que a mayor diversidad de tipos de bacterias probióticas en los alimentos –y dosis consumida– menor era la presión arterial de los participantes.
Sun concluyó en un comunicado que “la pequeña colección de estudios que observamos sugieren que el consumo regular de probióticos puede ser parte de un estilo de vida saludable para ayudar a reducir la presión arterial alta, así como a mantener niveles sanos de presión arterial”.
“Esto incluye probióticos en el yogur, la leche y el queso fermentado y amargo, y los suplementos probióticos”, precisó.
Sin embargo, los autores advirtieron que es necesario llevar a cabo mayor investigación, no solo porque la cantidad exacta de probióticos que fueron consumidos varió de un estudio a otro, sino también porque se desconocen aspectos como cuáles son los microorganismos y las combinaciones diferentes de tipos de bacterias probióticas que podrían tener un mejor efecto en la presión arterial.