A cuatro años del feminicidio de María de Jesús Jaimes Zamudio, “Marichuy”, quien era estudiante del Instituto Politécnico Nacional (IPN), el caso aún sigue impune pues no hay ningún detenido por el asesinato de la estudiante.
El 16 de enero de 2016, Elidieth Yesenia Zamudio, madre de María de Jesús, recibió una llamada donde se le informó que su hija sufrió un accidente.
“Mari tuvo un accidente, se cayó y está en el hospital”, escuchó al otro lado del teléfono.
Mari estaba al borde de la muerte, con el cráneo y las piernas fracturadas; en coma. Ocho días después falleció.
De acuerdo con el relato de Mario Monterrubio, presunto cómplice del crimen, la noche del 15 de enero, tras reunirse con un grupo de cuatro amigos y el exprofesor del IPN, Julio Iván Ruiz Guerrero en un karaoke, regresaron al departamento en el que vivía Mari y según Mario ella, de pronto, “enloqueció”.
Según Monterrubio, Mari se suicidó, lanzándose desde su departamento, en un quinto piso. Versión que ya fue desestimada por las autoridades.
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En las pesquisas, los vecinos declararon que la joven fue sujetada para subir al departamento, también señalaron que fue lanzada por la ventana.
Yesenia Zamudio denunció no haber recibido apoyo de la comunidad politécnica e incluso ser blanco de amenazas por parte de estudiantes que apoyan al profesor.
La madre de la víctima dijo que uno de los profesores de su hija -que actualmente ya no labora en el IPN-, Julio Iván Ruiz Guerrero, la acosaba.
La joven de 19 años fue “aventada por la ventana desde un quinto piso”. Esto porque el entonces profesor le intentó quitar su ropa “para ultrajarla, con la ayuda de otro estudiante”, denunció.
“Cae de más de 12 metros de altura y ellos salen huyendo y la dejan abandonada. Ella sufre fractura de fémur derecho y tuvo otras. El golpe en la cabeza inflamó su cerebro”, dijo.
“La intención de los agresores era deshacerse del cuerpo de mi hija” porque no la ayudaron tras el ataque, agregó. María de Jesús falleció el 24 de enero.
Yesenia expuso que al principio los agresores trataron de pasar el asesinato como suicidio y aunque se tienen pruebas para detener a los culpables, siguen en libertad.
Tuvieron que pasar cuatro años para que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) reclasificaron el caso como feminicidio, y ahora solo esperan que emitan las órdenes de aprehensión contra las personas involucradas.
Por el feminicidio de Marichuy aún no hay detenidos.
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Incluso, la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México emitió una recomendación pues tras realizar su investigación detectó que “hay omisiones, corrupción e ineptitud y falta de interés por parte de diversos servidores públicos” para aclarar los hechos.
Ayer, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) se disculpó públicamente por el feminicidio de María de Jesús Jaimes Zamudio, ‘Marichuy’.
De esta forma, el IPN se suma a la disculpa pública que ofrecieron autoridades del Gobierno Federal y de la Ciudad de México, además de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), a Yessenia Zamudio Solórzano, integrante del Frente Nacional “Ni una Menos” y madre de la estudiante.
