Que las personas imputadas por el delito de feminicidio enfrenten prisión preventiva oficiosa para evitar que huyan, fue la reforma que aprobó este jueves la Cámara de Diputados con 364 votos a favor.
El feminicidio, por su alta gravedad y nivel delictivo, debe ser tratado como un delito grave que amerite prisión preventiva para reducir los índices de impunidad, señaló la diputada priista, Claudia Anaya, quien propuso esta iniciativa.
“Por ser feminicidio y por no estar en el catálogo de delitos que ameritan prisión preventiva, el juez manda al imputado a su casa a enfrentar el proceso, entonces queda expuesta la víctima y por lo regular el feminicida huye”, dijo la diputada.
Anaya señaló que es ilógico que el homicidio doloso sí se encuentre entre los delitos que ameritan prisión preventiva y el feminicidio no, lo que representa un problema de incompetencia para los tribunales y jueces.
En México, del año 2000 al 2014, el número de las mujeres asesinadas ascendió a 26 mil 267, es decir, 5.1 mujeres son asesinadas diariamente, según cifras del INEGI, además que en los últimos 15 años, el índice anual pasó de mil 284 a dos mil 439 feminicidios.
El Observatorio Ciudadano contra la Violencia de Género, Desaparición y Feminicidios en el Estado de México informó la semana pasada que sólo en la entidad se registraron 263 posibles feminicidios durante 2016.
La iniciativa aprobada por los diputados fue turnada al Senado de la República para su aprobación en los próximos días.