Después de casi cinco años de haber sido detenido, el exgobernador de Tabasco, Andrés Granier, fue sentenciado por un juzgado de primera instancia a más de 10 años de cárcel por desvío de recursos públicos durante su gobierno.
La Fiscalía General del Estado de Tabasco informó en un comunicado que quedó probada la responsabilidad de Granier en el delito de desvío de recursos.
Las indagatorias por estos hechos se relacionan con un faltante de 196 millones 918 mil 209 pesos y 60 centavos del sector salud, pertenecientes al cuarto año de la administración del ex gobernador.
De acuerdo con la fiscalía, el dinero deberá ser reintegrados al patrimonio estatal representado por el Poder Ejecutivo.
El juzgado lo sentenció a 10 años, 10 meses y 15 días de prisión, además de imponerle una multa y suspenderle sus derechos políticos mientras permanezca tras las rejas.
Granier, que gobernó Tabasco de 2007 a 2012 tras ser postulado por el Partido Revolucionario Institucional, se encuentra internado en la Torre Médica del Penal de Tepepan, en donde los doctores lo atienden de diversas afectaciones a su salud.
Además de él, otros seis exgobernadores mexicanos están detenidos por distintos delitos, y uno más, César Duarte, de Chihuahua, sigue prófugo.
De los ex gobernadores que fueron han sido detenidos durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, sólo Luis Armando Reynoso Femat, exgobernador de Aguascalientes, ha recibido sentencia, la cual fue de 6 años y 9 meses de prisión.
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