Así como la piel cicatriza las heridas al paso del tiempo, la Tierra se cura sola después de un terremoto. Debajo de las fallas que surgen durante un terremoto, las grietas formadas tras la ruptura de rocas se reparan gradualmente. La duración que tome el proceso de curación podría determinar con mayor precisión el tiempo de los ciclos de terremotos en una zona de fallas.
Eugenia Rodríguez