Lixon es como una brillante ficha de dominó. En él prevalece más el tono oscuro reluciente de piel, que hace contraste con su dentadura blanca casi perfecta, de no ser porque le falta un diente.
Sonríe y desnuda su ser. Promete: será un famoso reggeatonero. Como los que escucha con sus enormes audífonos MT Lider. Mueve las manos y la cabeza, tararea. Para lograr tal sueño, llegará a Miami uno de estos días.
Mauricio Ferrer