Una gran canción —si es que realmente lo es— no necesita más que una guitarra y una voz. “Honey” es un ejemplo de esto.
Con solo una guitarra eléctrica, una generosa dosis de reverb y una voz capaz de reflejar la inmensa soledad de la letra, Torres, una joven cantante de 22 años ha sido capaz de crear una canción de enorme poder con los más mínimos ingredientes.
Esteban Castro