La Universidad de Guadalajara (UdeG) queda muy mal parada luego de los testimonios recabados en radio de jóvenes estudiantes que revelan que la casa de estudios les está ofreciendo puntos extras a cambio de que asistan a las marchas de protesta contra el Gobierno de Jalisco.
Como es sabido, hay un conflicto político entre el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, y el mandamás de la UdeG, el exrector Raúl Padilla López, luego de que el primero redireccionara una partida de 140 millones de pesos que se invertirían en el Museo de Ciencias Ambientales y que ahora se ejerce en un nuevo Hospital.
Justo en medio de esa pugna política han quedado los jóvenes estudiantes de la UdeG, que están siendo usados como bala de cañón para presionar a las autoridades estatales. Y, al parecer, la estrategia va para largo porque, apenas este 19 de octubre, el rector, Ricardo Villanueva Lomelí, reconoció que tenían pensado sacar cada día a las calles a una comunidad estudiantil diferente.
En los testimonios recabados por la Estación Notisistema, se escucha a los estudiantes de la Prepa 3, de la UdeG, decir lo siguiente, tras participar en la Cuarta Caminata de la casa de estudios:
“Sí, nos dieron diez puntos solo… –¿en qué materia?–, en la que sea, los podemos poner en la que sea”. (…) “Claro, pero pues yo pienso que es necesario y nos beneficia venir a la marcha y los puntos también, entonces muy bueno”. (…) “Nos están ofreciendo diez décimas sobre 100 en nuestra calificación en cualquier materia” (…) “Sí es la misma situación, es como un extra los puntos, sí está bien venir a la marcha”.
Muy triste que la UdeG trate a sus estudiantes como clientelas políticas, infundiéndoles formas y costumbres antidemocráticas, antes que un pensamiento crítico y autónomo.
JALISCIENCES SE SIENTEN MÁS SEGUROS
Los habitantes del estado de Jalisco se sienten más seguros en sus ciudades, al menos esa es la conclusión que se desprende tras la publicación de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana publicada trimestralmente por el INEGI.
Según esta medición, las principales urbes evaluadas en la entidad jalisciense tuvieron una disminución en su percepción de inseguridad en el periodo de julio a septiembre de este año.
La capital Guadalajara, por ejemplo, pasó del 84.6 al 83.2 por ciento, Tlaquepaque de 69.8 a 66, Tonalá de 86.1 a 78.8, Tlajomulco de Zúñiga de 70.9 a 65 y Puerto Vallarta, de 39.4 a 31.5 por ciento. La disminución más significativa fue en el municipio de Zapopan, que bajó su porcentaje de percepción de inseguridad de 77.5 a 49.4 por ciento.
Aunque muchos de los municipios de la Zona Metropolitana mantienen un porcentaje por encima de la media nacional, parece darse un cambio de tendencia.