La ritalina o metilfenidato se utiliza para tratar pacientes con Trastorno de Hiperactividad por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH).
Pero un estudio publicado la semana pasada en JAMA Psychiatry, demostró que una sola dosis de metilfenidato, puede normalizar las vías nerviosas que no tienen control en el cerebro de un adicto a la cocaína.
Tan solo en Estados Unidos, hay 800 mil personas –mayores de 12 años– que son adictas a la cocaína, según un informe del gobierno sobre el Abuso de Sustancias y Servicios de Salud Mental.
El metilfenidato, que en su presentación comercial es el Ritalin, de Novartis, puede generar los mismos cambios en el cerebro que produce la adicción a la cocaína.
No significa sustituir una droga por la otra, el Ritalin es un fármaco estimulante que se usa en el tratamiento del TDAH y la ansiedad, al igual que el Adderall. Por lo que solamente funcionaría para la rehabilitación de los adictos a la cocaína.
Ya que alrededor de 7 millones de estadounidenses abusan del metilfenidato o Ritalin como una droga o para mejorar su desempeño académico.
Otro estudio, que fue financiado por el Instituto Nacional de Abuso de Drogas, comprobó esta teoría al analizarla con ratones, “la exposición de los roedores al metilfenidato durante dos semanas realmente producía cambios comparables a los observados ante la exposición crónica a la cocaína”, subrayó Nora Volkow, quien forma parte del Instituto Nacional de Abuso de Drogas.
“El metilfenidato, que se supone que es un compuesto bastante inocuo, puede tener efectos estructurales y bioquímicos en algunas regiones del cerebro que pueden ser aún mayores que los de la cocaína”, dijo Yong Kim, de la Universidad Rockefeller, en Nueva York.
Nora Volkow indicó que a pesar de que millones de niños con TDAH consumen ritalina, ésta no aumenta su riesgo de adicción durante la adolescencia.