Por lo general, las grandes empresas pagan exorbitantes sumas de dinero a sus más altos ejecutivos, quienes a lo largo de sus carreras le demuestran al mercado laboral que generan cifras aún más grandes.
Sin embargo, esto no siempre se cumple, ya que una mala administración, por más bueno que sea el administrador, puede llevar a la bancarrota hasta a la más grande de las empresas.
Entre los casos más recientes se pueden señalar a Sears Holdings y JC Penney, ambos grandes minoristas estadounidenses.
Jorge Polanco